Un aviso para navegantes: Descubriendo Nunca Jamás no es un acercamiento fiel a la figura del famoso literato escocés sino un encantador relato, con algunos apuntes reales, sobre la gestación del clásico infantil Peter Pan ("el niño que no quería crecer) gracias al encuentro casual de Barrie con los hijos del matrimonio Lewellyn Davies, que le sirvieron de inspiración. Los que han leído la curiosa biografía del escritor James Matthew Barrie sabrán que  esta relación fue muy pura, fraternal, y que Barrie es un auténtico héroe nacional en su tierra natal, Escocia.

 

Descubriendo Nunca Jamás es una historia amable, llena de sensibilidad y poesía,  que retrata, con  acierto,  el complejo mundo de la infancia. Esa etapa de la vida en la que la imaginación y la fantasía son moneda corriente y que Forster ha sabido trasladar con gran belleza a la pantalla. Si van a verla no pierdan de vista la portentosa actuación de  Freddie Highmore, encarnando al pequeño y torturado Peter, ese niño-viejo que ha sufrido la pérdida de un ser amado y se siente incapaz de crear historias.   

 

Si optan por la versión original de la película, reparen en el encomiable intento de Johnny Depp por  imitar el acento escocés.