Sr. Director:

Comienza el curso con un incremento considerable de hijos de inmigrantes musulmanes en las aulas. Estoy totalmente de acuerdo en que la escuela es el mejor medio para lograr su integración. Los políticos laicistas creen que se favorecerá la misma eliminando los símbolos religiosos de los centros católicos. Denota ello poco conocimiento del Islam. Lo que más molesta a los musulmanes creyentes son precisamente las manifestaciones del laicismo.

El relativismo moral, la concepción de la libertad entendida como la posibilidad de hacer cada uno lo que quiera, una visión de la sociedad que ha suprimido a Dios de su horizonte de referencia, y una religión recluida a la intimidad de las conciencias y sin ninguna influencia en la vida civil, son aspectos que confirman a los musulmanes que la sociedad occidental está corrupta y en decadencia.

El Corán es más tolerantes con la gente del Libro (los cristianos), que con los incrédulos y ateos que merecen ser combatidos. Una enseñanza impregnada de laicismo no contribuirá a la mejor integración de los musulmanes, sino a que se encierren en sus guetos, con sus gentes y sus costumbres, para no contaminarse del modo de vida occidental. El problema de la integración no se resuelve en soluciones simplistas, pero no creo que pase por el que los centros cristianos dejen de parecerlo.

José Luis Jimenez Villanueva

jljvillanueva@hotmail.com