El gasoducto Península-Baleares no contó con la presencia de ZP, que no quería ser fotografiado con Francisco Camps

No han sido malos los resultados de Enagás durante los nuevos primeros meses del presente ejercicio y si bien las inversiones han batido marcas lo cierto es que a partir de ahora el plan del equipo directivo consiste en reducirlas al mínimo, una vez terminada la gran obra del gasoducto entre la Península y las Islas Baleares. Los proveedores ya saben a qué atenerse.

Por cierto que a la inauguración en la Comunidad valenciana del mencionado acueducto se negó a ir Zapatero, quien no quería que nadie pudiera fotografiarle junto al presidente valenciano del PP, Francisco Camps. Puede decirse que fue una inauguración fantasma.