Sr. Director:
Hace unos días el gobierno catalán organizó una sesión "didáctica" en el Palacio de la Generalitat para indicar a los profesores cómo explicar los hechos de 1.714 a los alumnos. 

Por lo visto, aprender lo de 1.714 es mucho más importante que las matemáticas o la lengua y merecía un acto especial para su correcto aprendizaje. Como era de esperar, los niños debían entender que Cataluña estuvo en el bando de "los buenos" (sic), la libertad y el progreso frente a "los malos" (sic), por supuesto, de otras partes de España.

Todo ello aderezado con fotografías de actos independentistas para mostrar la "actualidad del conflicto". Creo que fue una visión simplista, muy poco objetiva y con una intención evidente de adoctrinamiento político del alumnado.

Mal vamos cuando los políticos acaban convirtiendo la educación en un juguete a su servicio.
María Sánchez Reyes