(Oído en radio, visto en TV) Jorge Bustos (COPE): "A estas alturas, yo creo que Pedro Sánchez ya debía saber que los jueces del Supremo no son como su fiscal general: no son peones de nadie"
En la COPE, Jorge Bustos opinaba: "Cualquiera que no llevara puestas unas gafas ideológicas anti-Ayuso podía advertir la culpa en la conducta del fiscal general, antes, durante y después de la filtración. Llegó al puesto ya mal, porque llegó por ser la mano derecha de la ministra y fiscal general Delgado, esposa de un juez prevaricador. Y el Consejo General del Poder Judicial ya declaró 'inidóneo' el nombramiento de García Ortiz. Pedro lo puso ahí como si fuera su soldado, y él decidió obedecer como tal". "A estas alturas, yo creo que Pedro Sánchez ya debía saber que los jueces del Supremo no son como su fiscal general: no son peones de nadie. Son la élite intelectual del derecho español. Han llegado allí por méritos propios con gobiernos de distintos signos y se deben únicamente a su prestigio —concepto totalmente ajeno al señor García Ortiz. Pues en virtud de un presunto conflicto entre la sacrosanta mayoría que lo invistió a él y el malvado poder judicial que investiga sus escándalos de corrupción. Y ayer mismo esbozó ese planteamiento populista en el Congreso mientras hablaba de defender “el privilegio de la democracia”.
Carlos Herrera (COPE): "Esa condena no deja de ser de alguna manera, una condena también a él (Sánchez)"
En la COPE, Carlos Herrera opinaba: "El Tribunal Supremo le quita la razón a Pedro Sánchez, que había dicho que el fiscal general era inocente, o parecía ordenar al Supremo que dijera que el fiscal era inocente, y ha dejado claros, muy claros, los hechos. En la fiscalía general del Estado se desarrolló una operación política en la que se invadieron los derechos de un ciudadano particular, que era la pareja de una rival política. Y por esa razón se urdió toda la operación. Es decir, el presidente de las primeras veces, que es Sánchez, se le añade una vez más, otra vez, la primera vez que se condena a un fiscal general en la democracia, y le tenía que pasar, como no, a Pedro Sánchez. Esa condena no deja de ser de alguna manera, una condena también a él. España es un país que tiene un fiscal general delincuente, al que protege un gobierno que cometió un delito muy grave. Fíjense, aunque la condena parezca leve, ahora les doy detalles. La reacción de sus partidarios de la izquierda en España, prácticamente toda es extrema izquierda. Y es una extrema izquierda muy rabiosa, muy rabiosa, iracunda. Y que ha reaccionado de forma patética, golpismo judicial, hablando de golpe a la presunción de inocencia, etcétera".
Juan Ramón Lucas (RNE): "El gobierno no ha recibido en silencio la sentencia condenatoria"
En RNE, Juan Ramón Lucas afirmaba: "El gobierno, que va a tener que poner en marcha ya el relevo del fiscal general del estado, no ha recibido en silencio la sentencia condenatoria".
"El poder. Los poderes. Es curioso cómo esta mañana esgrimen Gobierno y oposición conceptos tan dispares, y al mismo tiempo esenciales, sobre él. Sobre el poder. Además sin expresarlo, digamos que de manera implícita".
Ignacio Peyró (SER): "Ahora lo más difícil, sin embargo, va a ser pagar los huevos al precio que antes pagábamos los huevos con trufa"
En la SER, Ignacio Peyró apuntaba: "Y a mí, por ejemplo, me basta la tortilla de patata para tener en lo más alto las aportaciones de España al género humano. Es un plato que los franceses, gente de tortillas, nunca entendieron, y que la cocina francesa, en toda su gloria, tampoco alcanzó. Y como tantas cosas españolas buenas, del Quijote a Julio Iglesias, quizá no debería funcionar, pero funciona.
Ahora la tortilla de bar de cada día corre peligro, entre gripes aviares y el precio de los huevos. Esos huevos que alimentaban, que eran sanos, que costaban poco y que nos permitían mil versiones. Ver en un supermercado nada pijo la docena a cinco euros es como para renegar no ya de tu país, sino del mundo. Y confirma que nos hemos vuelto locos. Antes había huevos blancos y morenos y ahora todo es más difícil: los hay bio, los hay eco, de gallinas enjauladas, de gallinas sueltas y hasta de gallinas felices. Ahora lo más difícil, sin embargo, va a ser pagar los huevos al precio que antes pagábamos los huevos con trufa".









