El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el techo de gasto para los presupuestos de 2021 con un incremento inédito del 53,7 % respecto al de este año, que se financiará en gran parte con los fondos prometidos por la Unión Europea, o eso dice el Gobierno. Además, estima que el déficit alcanzará este año, a causa de los gastos asumidos por la epidemia de coronavirus, el 11,3 % del PIB -frente al 10,3 % que suponía la estimación oficial hasta ahora- y que el año que viene se pretende reducir esa cifra al 7,7 %. Y el producto interior bruto de desplomará este año hasta un 11,2 %, frente al 9,2 % que se estimó en mayo.
Gay de Liébana (COPE): “Desde el Gobierno se envía un mensaje reconfortante: que esto del coronavirus es solo un impacto poco significativo y transitorio. En 2021 iremos de coña y en 2022 volveremos al mundo de ensueño, amén”
En la COPE, el economista José María Gay de Liébana opinaba: “Principios de marzo. La responsable económica del Gobierno, ante el miedo generalizado por el virus, nos tranquilizaba, cuando Italia vivía días caóticos y Francia revisaba a la baja sus previsiones. ‘Las estimaciones – sobre el coronavirus – apuntan a un impacto poco significativo y transitorio’ sobre la economía, decía. Por tanto, no había necesidad de modificar las previsiones macroeconómicas del Gobierno. Ayer el Gobierno presentó su nuevo cuadro macroeconómico o, mejor dicho, un esbozo con rasgos simplistas. Efectivamente, nuestra economía, según el Gobierno, caerá más de lo que previsto en abril, pero no tanto como prevén otros organismos. Eso infunde tranquilidad. Tampoco la previsión de paro es tan mala y el empleo no se resentirá tanto. Respiramos profundamente. Y el próximo año, con la vacuna y el dinero de los fondos que llegará de Europa, la economía española irá como un tiro.
Se aumenta el gasto público a lo grande y ya se cuadrarán los números ajustando impuestos, como el IVA, cercenando planes de pensiones, subiendo cotizaciones de los autónomos y, acaso, destopando la base máxima de cotización. Pagaremos más. Desde el Gobierno se afirma que la recuperación sigue en marcha y que durante el tercer trimestre el PIB ha crecido un 13% por encima de lo previsto. Sin embargo, eso no cuadra con lo que dice el sector del comercio: caída sin parangón desde la Guerra Civil, con un descenso de las ventas en septiembre del 34% y acumulando una caída del 40% sobre 2019. Y no hablemos de la hostelería, Don Carlos, y de Madrid y otros lugares pseudo-confinados. En fin, que desde el Gobierno se envía un mensaje reconfortante que esto del coronavirus es solo un impacto poco significativo y transitorio. En 2021 iremos de coña y en 2022 volveremos al mundo de ensueño, amén”.
Dolors Montserrat (RNE): “La propuesta de Sánchez es menos PIB, más déficit, más deuda, más impuestos, y recortes, lo mismo que siempre que ha gobernado la izquierda”
En RNE, Dolors Montserrat, eurodiputada del PP, se ha referido al ‘Plan de Recuperación’ que el Gobierno de Pedro Sánchez va a presentar hoy: “La UE, el Parlamento y la Comisión han hecho los deberes, han puesto sobre la mesa el plan más grande de ayudas para que lleguen a los sectores mas dañados en España, y han explicado qué reformas se deben hacer”. “La Comisión va a condicionar la recepción de las ayudas a estos objetivos y los planes nacionales tienen que cumplirlos: crecimiento económico, crear empleo, reforzar la sanidad, reforzar que no haya abandono escolar, y la eficiencia de gasto. La propuesta de Sánchez es menos PIB, más déficit, más deuda, más impuestos, y recortes, lo mismo que siempre que ha gobernado la izquierda”. "Las previsiones que ayer nos dio el Gobierno son muy tristes: solo proponen más deuda, más impuestos y más gasto”.
Carlos Herrera (COPE): "El Gobierno ha sacrificado a las empresas para salvarse a sí mismo con una deuda insoportable"
En la COPE, Carlos Herrera afirmaba: "Pero ayer el Gobierno aprobó un techo de gasto de casi 200 mil millones de euros, que es un 53% más de este año. Es el más expansivo de la historia. Fíjense, en el ejercicio en el que paradójicamente más se va a contraer la recaudación con el paro, la caída empresarial, el que más se va a disparar la deuda. Es un cóctel explosivo".
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¿Cómo piensan cubrir el gasto previsto? Y aquí está la trampa. Pueden hacerlo con las transferencias de la UE, pero Europa da el dinero a cambio de determinados compromisos. Y también subiendo los impuestos con todo tipo de excusas. Es que de Europa van a llegar 140 mil millones. Sí, sí, en seis años, es decir, de momento llegan 20. Y todo lo demás, pues procederá de una fiscalidad agresiva con el IVA, los autónomos, sociedades, impuestos indirectos verdes, marrones, al ahorro, a los cuatro ricos que hay en España... Y no hay más. ¿La alternativa cuál es? Adelgazar el gasto corriente de la administración pública y dejar de llamar Estado del bienestar a lo que en realidad es el bienestar del Estado, pero eso no va a ocurrir.
El Gobierno ha optado por sacrificar al sector productivo, a las empresas, a los trabajadores para rescatarse a sí mismo porque en vez de un plan de reforma estructural de la administración lo que vamos a tener es una deuda insoportable que mañana pagarán las próximas generaciones, que ahora van a pagar los trabajadores, las pymes para que estos presuman de una ficticia agenda social porque no hay nada más antisocial que la deuda, el déficit, el paro. Y no hay nada más dañino para un país que planificar una sociedad dividida en la que la mitad más 1 sea subvencionada y la mitad menos 1... Pero hay que votar, haga un esfuerzo insoportable".
Carlos Alsina (Onda Cero), irónico: “Por fin seremos el país que siempre quisimos ser, todo investigación y desarrollo, todo innovación y fibra óptica, todo modernidad, como desea Garzón, en lugar de tanta construcción y tanto turismo"
En Onda Cero, Carlos Alsina destacaba: “España contiene el aliento, expectante, ante el nuevo horizonte de luz y de color que describirá esta mañana su presidente. Nada menos que la transformación de la economía nacional, la ansiada conversión de nuestro modelo productivo: por fin seremos el país que siempre quisimos ser, todo investigación y desarrollo, todo innovación y fibra óptica, todo modernidad, como desea Garzón, en lugar de tanta construcción y tanto turismo. Un hito la jornada de hoy, ya lo verán. Como fue un hito el aperitivo, ayer, de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Anunciando que el próximo año los ministerios podrán gastar un 50 % más que éste.
Aprovechar la recesión, y la epidemia, para transformar de arriba abajo España. Que no se diga que el gobierno no piensa en grande. Por fin los Presupuestos que entierran la austeridad, como dijo ayer el doctor en Económica Pablo Tuit Echenique. Deslumbrados van a quedar los embajadores europeos, que podrán informar a sus gobiernos respectivos de que no es verdad eso que ha escrito el catalán Jon Sindreu en el Wall Street Journal: eso de que España, en otro tiempo estrella de la economía europea, va camino de ser su hijo más problemático porque la segunda ola del coronavirus no da tregua y porque los fondos europeos llegarán tarde y no solucionarán el impacto que la paralización del turismo tiene en la economía española. Nada de eso, podrán decir los embajadores europeos con el Himno de la Alegría sonando de fondo: es precisamente el dinero europeo, benditos sean los 140.000 millones y que lleguen pronto, los que van a relanzar la actividad española hasta el infinito y más allá. Con permiso del odioso coronavirus”.
Fernando Ónega (Onda Cero): “Lo que me inquieta, con fondos europeos o sin ellos, es lo de Josep Pla: "¿Y esto quién lo paga después?”
En Onda Cero, Fernando Ónega decía: “Yo espero que vengan los primeros 27.000 millones europeos y los siguientes. Si no vinieran, sería un golpe muy serio para la economía de este país; pero, a efectos presupuestarios, supongo que, si no vinieran, se rebaja esa cantidad, el gasto se reduce, se queda en 170.000 millones y ya está. De aquí a enero y los días de retraso que contempla Carmen Calvo, supongo que ya se sabrá. Lo que me inquieta, con fondos europeos o sin ellos, es lo de Josep Pla: "¿Y esto quién lo paga después?".
El papel lo aguanta todo, pero la realidad es muy dura. Tan dura, que da vértigo. Vamos, según se publica, a un déficit entre 100.000 y 240.000 millones, según evolucione el virus, sigan cayendo pequeños negocios y pinche o no la recaudación. El déficit se cubre con deuda y el endeudamiento puede ser estratosférico. Descomunal, que diría Rajoy. Se va a dejar una deuda que tendrán que pagar nuestros bisnietos.
Los gastos financieros, los intereses que no se incluyen en las previsiones del Gobierno, un mordisco que durará más de una generación. Pero he visto la reacción de la Bolsa después de difundirse estos números, y la Bolsa se puso a subir. Con lo cual, no me atrevo a opinar de cuestiones tan doctorales, ni tengo preparación para ello. En mi sabio pueblo de Lugo dirían: si esas cuentas del gobierno suscitan tantas dudas, pero dicen que pueden frenar la crisis, y la Bolsa, que algo sabe de números, reacciona subiendo, algo bueno tendrán”.
Rubén Amón (Onda Cero): “¿no os parece insólito que el Gobierno reaccione a una caída del PIB del 11,2% en 2020 inventándose que creceremos un 7,2% en 2021?”
En Onda Cero, Rubén Amón ganaba sus preguntas: “Pablo Casado descarta que vaya a producirse una moción de censura a Díaz Ayuso. ¿Y cómo puede descartarla, si no puede decidirla ni impedirla el PP?
¿Cómo se van a poner de acuerdo los Gobiernos central y de Madrid con las palabras si no se ponen de acuerdo con los números?
Hablando de números, ¿no os parece insólito que el Gobierno reaccione a una caída del PIB del 11,2% en 2020 inventándose que creceremos un 7,2% en 2021?
Podemos critica la visita del Rey a Barcelona. ¿Qué tal si para calmar las cosas acompañan al Rey González, Aznar y Rajoy? Mejor si al séquito lo escolta la Guardia Civil, ya puestos.
Errejón, se veía venir, elogia la encíclica del Papa y restriega a los cristianos que sean tan indulgentes con el neoliberalismo. ¿No debería excomulgarse a Rodríguez Braun, por muy argentino que sea Rodríguez Braun y por muy argentino que sea el propio Papa?
¿Conseguirá Trump convertir su alta médica en una victoria electoral? De la debilidad que física que le amenazaba a la demostración de que sigue siendo Sansón”.
Ángels Barceló (SER): “Ante una crisis sin precedentes, la respuesta por parte del Gobierno de coalición es plantear una subida récord del gasto. Una enmienda a la totalidad de las recetas aplicadas en la anterior crisis”
En la SER, Ángels Barceló apuntaba: “Ante una crisis sin precedentes, la respuesta por parte del Gobierno de coalición es plantear una subida récord del gasto. Una enmienda a la totalidad de las recetas aplicadas en la anterior crisis. El mayor gasto público planteado nunca en democracia, un 54 por ciento más para luchar contra el COVID. Hoy sabremos, dentro de pocas horas, cuál es el plan del gobierno para el reparto de este aumento sin precedentes.
Sabemos en qué se tradujo el austericidio de hace unos años, lo hemos podido comprobar en plena pandemia con los efectos de los recortes en sanidad y en educación, por ejemplo. Hoy conoceremos las líneas maestras de los pilares sobre los que el Gobierno quiere empezar a reconstruir el país devastado por la pandemia.
El destino de este esfuerzo en el gasto público anunciado ayer tiene que ser el que defina el modelo sobre el que tiene que sustentarse la reconstrucción económica y también, y sobre todo, la creación de empleo en el tiempo más corto posible. En unas horas saldremos de dudas”.
Iñaki Gabilondo (SER): “La lucha contra el virus en la que estamos fracasando queda adulterada por la controversia económica”
En la SER, Iñaki Gabilondo comentaba: “El plan de recuperación económica que el Gobierno presenta este miércoles en Bruselas, atravesando la pandemia y atravesado por la pandemia, se desdibuja o se deforma, sin embargo, es fundamental. Es determinante para recibir los 140.000 millones de ayuda europea.
A contrario sensu, la lucha contra el virus en la que estamos fracasando queda adulterada por la controversia económica. Asuntos que merecerían acaparar toda la atención del país, toda la energía del país, se enredan, se encrespan, devaluando a todos y cada uno de ellos.
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Sólo nos falta Vox para terminar de estragarnos con la olla podrida de su moción de censura, una iniciativa que, por cierto, favorece a Sánchez por dos vías: una, porque agrupará en torno suyo a todo el Parlamento y dos, porque el PP la desautoriza, afirmando que solo hay una alternativa posible a Sánchez, Pablo Casado, y no cabe regalo mayor para el presidente, porque si Casado es la única alternativa, Sánchez puede dormir tranquilo”.