Contábamos en Hispanidad que con tal de seguir en Moncloa, Sánchez claudicó, una vez más, ante Irene Montero: la ley Trans sigue adelante tal y como está. Así, la Comisión de Igualdad del Congreso rechazó la enmienda en la que los socialistas proponían que fuera un juez el que tuviera que autorizar el cambio de sexo de los menores de 16 años.

Irá al pleno con la redacción del Ministerio de Igualdad, es decir, que la necesidad de la intervención de un juez será solo en los menores de 14 años y mayores de 12. Entrará en el orden del día del último pleno del año, el del 22 de diciembre. Como les decíamos en Hispanidad, antes de que acabe el año, Sánchez tiene que saldar sus deudas, aprobar todas las barbaridades posibles y volver al centro de la moderación de cara a los dos años electorales que vienen. 

Poco a poco vamos conociendo cómo va a quedar la ley y, según informa Okdiario, Irene Montero ha incorporado una petición de sus amigos de Bildu: los Inspectores de Trabajo tendrán "formación especializada" sobre la Ley Trans para reforzar la vigilancia sobre la aplicación de la norma y sus obligaciones en las empresas. Y es que la ley contempla medidas para asegurar la "igualdad de trato y oportunidades" del colectivo trans: por ejemplo, se incluirá en los convenios colectivos claúsulas de "promoción de la diversidad en materia de orientación sexual, identidad sexual, expresión de género y características sexuales y de la diversidad familiar", además las empresas tendrán que elaborar códigos éticos y protocolos que aseguren la "protección" del colectivo. 

Para todo ello, Irene formará al personal de Inspectores de Trabajo para que puedan vigilar que su ley se cumple como ella quiere, no como con el 'solo sí es sí'.