
Se acercan las elecciones en Hungría, y el primer ministro, Viktor Orbán, está viviendo estos meses de su mandato con intensidad. Si recientemente introducía cambios constitucionales para proteger a los menores y la libertad ciudadana, en mayo vuelve con fuerza y molestando enormemente al hombre del NOM, George Soros.
"En la orquesta de Bruselas, sólo se permite una melodía. Si cantas una melodía diferente, te recortarán la financiación, difamarán a tu gobierno e intentarán reemplazarte con una marioneta. ¿Su respuesta a cada crisis? Más poder para ellos, menos soberanía para los Estados miembros. ¿El resultado? Una Unión en declive y los europeos pagando las consecuencias. No podemos permitir que esto continúe", comenzaba su discurso el húngaro.
Orbán ha conseguido sacar adelante la ley conocida popularmente como "stop Soros", que pondrá fin a las injerencias extranjeras que aprovechan ONGs y medios de comunicación para condicionar la vida política del país.
Se dan poderes a la Oficina para la Protección de la Soberanía que podrá recomendar sanciones, acceder a cuentas bancarias, intervenir dispositivos electrónicos y prohibir donaciones si detecta que alguna organización recibe apoyo económico desde el exterior para fines que van contra los valores nacionales o que sean una amenaza a la soberanía húngara.
El Gobierno entiende por amenaza cualquier acción que cuestione la identidad constitucional de Hungría, sus tradiciones cristianas o los principios familiares y biológicos promovidos por el Estado.
🇭🇺🇺🇦🇪🇺 | El auténtico «no es no», por Viktor Orbán:
— ʜᴇʀQʟᴇs (@herqles_es) May 19, 2025
«No queremos ser arrastrados a la guerra de Ucrania.
No queremos que nuestros agricultores se vean llevados a la ruina.
No queremos que el país más seguro de Europa se convierta en un paraíso para el crimen organizado.
No… pic.twitter.com/pNZkb00Gqa
Las organizaciones que sean acusadas de delito se enfrentan a multas de hasta 25 veces el monto financiado desde el extranjero, y, en caso de reincidencia o impago, podrían ser clausuradas de manera definitiva.