Empezamos esta crónica semanal de Hispanoamérica -en la que hacemos especial énfasis en la defensa de la vida, la familia natural, la libertad de enseñanza y el bien común, es decir, los principios no negociables establecidos por Benedicto XVI- en México, para defender el principio no negociable del derecho a la vida desde la concepción hasta la muerte natural.

El pasado 27 de abril, unas 15.000 personas se manifestaron en la ‘Marcha por la Vida’, en la capital mexicana, en contra del aborto y en defensa de las madres embarazadas, bajo el lema ‘Sin vida no hay futuro’.

En el comunicado emitido por la plataforma Pasos por la Vida -uno de los organizadores- se decía: “Hoy, ha marchado la generación a la que le duelen sus compañeros fallecidos en estos 17 años, la generación que exige nuestro Derecho al futuro”.

Los manifestantes provida destacaron también que “la mitad de las mujeres embarazadas abandonan sus estudios, mientras la causa número uno de discriminación laboral contra la mujer es el embarazo”.

Esta reivindicación se hace en el contexto de la campaña electoral en la que se encuentran inmersos los partidos y líderes de cara a las elecciones presidenciales del próximo 2 de junio, en las que también se elegirá a nuevos representantes federales, estatales y municipales. 

También se celebran elecciones generales en Panamá, el domingo 5 de mayo, en las que se elegirá al presidente y vicepresidente de la República, 20 diputados al Parlamento Centroamericano, 71 diputados a la Asamblea Nacional, 81 alcaldes de distrito, 702 representantes de corregimientos y 11 concejales, todos con su respectivo suplente.

Por ello, los obispos panameños emitieron un comunicado en el que afirman: “Nos comprometimos en acompañar, orientar y formar a la ciudadanía para ejercer un voto en libertad y conciencia para elegir gobernantes y autoridades responsables, que trabajen con coherencia, transparencia, honestidad y eficacia, que fortalezcan la institucionalidad democrática tan endeble en nuestro país”.

Asimismo, los prelados llamaron a los panameños a la oración y el ayuno, el pasado 2 de mayo, en todas las parroquias del país, pidiendo por el buen desarrollo de estos comicios generales.

“Invoquemos al Espíritu Santo para que nos abrace con sus siete dones, y nos haga capaces de empezar el camino del adecentamiento, la honestidad y la ética, eligiendo a los mejores para que nos gobiernen y que nos guíen a construir el Panamá que todos nos merecemos y soñamos”, concluye el comunicado.

Nuestro siguiente destino es Honduras, país al que acudió de visita recientemente Verónica Katz, responsable de proyectos de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) en esa nación.  

Honduras sufre los muchos problemas que genera la narcodelincuencia, en medio de los cuales los católicos practican su fe cristiana con fortaleza. Así, por ejemplo, es común que las maras cobren una “tasa de guerra” a los negocios familiares (un impuesto revolucionario), que al ser elevado provoca que muchos de esos comercios tengan que cerrar. 

Katz explicó: “Honduras se usa como país de paso para el tráfico de drogas hacia EE.UU u otros países. Las maras en Honduras controlan prácticamente todo”. “Por ejemplo, visitamos una parroquia cuyo territorio está controlado por dos de estas bandas, lo que complica enormemente el trabajo de la Iglesia”. 

Por otra parte, la escasez de curas ha ayudado a que las sectas y las iglesias protestantes vayan poco a poco proliferando: “El católico que solo lo es por tradición y no por convicción, se acaba volviendo parte de esos credos”.

Sin embargo, pese a todo lo anterior, los católicos hondureños colaboran en sus parroquias por las tardes, después de una agotadora jornada laboral en el campo. “En lugar de practicar la fe individualmente la viven juntos, como comunidad, lo cual es muy hermoso”, añadió Katz.

Nos vamos a Venezuela, donde el dictador venezolano Nicolás Maduro pronunciaba un discurso el 1 de mayo, el día del trabajador, en el que aseguraba que gracias a sus medidas económicas "asombraremos al mundo, nos tendrán que dar a Venezuela el premio Nobel de Economía, porque estamos construyendo una nueva economía".

Seguro que el jurado de los Nobel tiene en cuenta esa baladronada del dictador chavista, sobre todo al observar el hambre, la pobreza, la miseria y la inseguridad que sufren los venezolanos y por las que muchos de ellos se han visto obligados a huir del país…