Este jueves, el timo del tope ibérico del que tanto presume Teresa Ribera está más cerca de ponerse operativo y ser realidad, o sea, que usted pagará algo menos por la luz hoy; mañana, pagará mucho más. ¡Ole! Y al hilo de este tema, tanto Vox como PP han arreado con bastante razón a la vicepresidenta ecológica, hablando de “juego de trileros” y de “fracaso de la política energética”, porque pagarán los de siempre.

Todo ello mientras la vicepresidenta ecológica estaba sola en la bancada del Gobierno en el hemiciclo del Congreso de los Diputados, escuchando las intervenciones de todos los grupos políticos para convalidar el real-decreto ley de la ‘excepción ibérica’ que ya ha recibido el ‘ok’ definitivo de Bruselas. ¿Esta medida no era un ‘gran éxito del Gobierno Sánchez? Quien lo diría si observa la bancada azul y también la multitud de escaños vacíos entre las filas del PSOE.

Ribera sola en la bancada azul

Borrás (Vox), que parece que ha leído Hispanidad, señala que la ‘excepción ibérica’ es “un nuevo timo energético del Gobierno en el que acabarán pagando los de siempre”. “Prepárense para los precios que vienen”, añade

Desde Vox, su portavoz en la Comisión de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Mireia Borrás, ha empezado su intervención señalando que asistimos a “un nuevo juego de trileros” y que el real-decreto ley del tope ibérico parece “la hoja parroquial que no se leen ni los suyos”. Acto seguido, Borrás, que parece que ha leído Hispanidad, ha señalado que la ‘excepción ibérica’ es “un nuevo timo energético del Gobierno en el que acabarán pagando los de siempre”. “Prepárense para los precios que vienen”, ha afirmado más adelante, criticando que la subvención a los generadores de gas (es decir, la compensación que creará un nuevo déficit de tarifa) no la pagará el Gobierno, que “subirán las facturas y los contratos del mercado libre” y que el precio final del mercado mayorista será de unos 130 euros por megavatio hora (MWh)”.

Borrás ha subrayado que “España tiene todo para ser más soberano energéticamente y no tener una dependencia del 70%” como ahora, lamentando que miembros del Gobierno y otros diputados no asistieran la semana pasada a la jornada ‘Caminando hacia la soberanía energética de España’ organizada por Vox donde se habló de ese tema y se apostó por aprovechar todos los recursos (incluidos los nucleares) y los yacimientos que tiene nuestro país. También le ha espetado a Ribera que “no sirve de nada prohibir la nuclear, el fracking (fractura hidráulica) y el carbón” si luego se exporta este tipo de energías de otros países. Y por si todo lo anterior no fuera suficiente, ha advertido que el precio de los combustibles -que están disparados- podría subir otros diez céntimos más por litro con el futuro Fondo Nacional de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE).

Mariscal (PP) subraya que la subvención a los generadores de gas (es decir, el nuevo déficit de tarifa) ascenderá a 3.600 millones en un principio y “se deriva el pago en todos los consumidores (industriales y domésticos)”, pero advierte que por cada 10 euros que suba el gas, costará 1.500 millones más

Por su parte, desde el PP, Guillermo Mariscal, vicepresidente segundo de la Comisión de Transición Ecológica y Reto Demográfico, ha destacado que asistimos a una nueva muestra de “fracaso de la política energética” y no sólo por el escaso avance de las interconexiones. Con la ‘excepción ibérica’ considera que “los consumidores subvencionarán con 1.400 millones a empresas francesas y portuguesas”; también ha criticado que el descuento que tendrá en la factura ha ido bajando del 40% al 30%, 20% y ahora 15%, por lo que se acerca al 10% que predijo el PP; y que Ribera no ha hablado del real-decreto ley ni con los grupos políticos ni con el sector, lo que ve como una muestra más de la “soberbia” del Gobierno Sánchez.

Mariscal también parece que lee Hispanidad, porque ha subrayado que el tope ibérico es “una intervención radical del mercado” y que supondrá un sobrecoste y más riesgo para los inversores extranjeros en renovables, por lo que podrían acabar metiendo demandas en los tribunales. Asimismo, ha subrayado que la subvención a los generadores de gas (es decir, el nuevo déficit de tarifa que se creará) ascenderá a 3.600 millones en un principio y “se deriva el pago en todos los consumidores (industriales y domésticos)”, pero ha advertido que eso es con el precio del gas hoy, pero por cada 10 euros que tenga de incremento, dicha subvención costará 1.500 millones más. ¡Olé!