Como ha recogido Hispanidad, el secretario general de la OTAN, el holandés Mark Rutte, corrigió a Pedro Sánchez porque el presidente español --en uno de sus habituales juegos verbales de trilero-- aseguró que había pactado con la OTAN que España destinaría el 2,1% del PIB en presupuesto militar. Pero Rutte aclaró que no es el 2,1% sino que España debe llegar al 3,5% en capacidades militares puras (y hasta el 5% en total).
Hoy Pedro Sánchez viaja precisamente a La Haya (Países Bajos), para participar en la cumbre de la OTAN, donde seguramente podrá escuchar de boca de todos los primeros ministros que no les gusta un pelo su trilerismo. Y es que a Sánchez ya le van conociendo en Europa tan bien como le conocemos en España y por eso se está quedando solo, porque ya nadie se fía de él.
Así, por ejemplo, en un artículo en Financial Times, el presidente francés Emmanuel Macron y el canciller alemán Friedrich Merz señalaron: "Lo que se firme en esta cumbre sentará las bases de la estabilidad europea por décadas”.
También Polonia ya le ha dejado claro a Rutte que no aceptará "una excepción para España" del gasto del 5% porque supondría "una ruptura de la OTAN" y porque si Madrid no cumple hoy con el este, que no espere que otros cumplan mañana con el sur.
Un sur en el que, por cierto, la OTAN no acoge todavía para su defensa a Ceuta y Melilla (sí acoge a las Islas Canarias). Y es precisamente lo que ayer, el presidente de Vox, Santiago Abascal, exigió al Gobierno: que en las negociaciones en la OTAN consiga incluir a las dos ciudades españolas en África (también habló de Canarias) dentro del paraguas militar de la Alianza Atlántica.
🔴 Rueda de prensa completa de @Santi_ABASCAL
— VOX 🇪🇸 (@vox_es) June 23, 2025
"Un presidente corrupto, traidor, indecente se ha atrincherado en el Palacio de la Moncloa y está dispuesto a volar lo que queda del Estado de Derecho, con la única intención de evitar su juicio y de evitar la cárcel junto a sus… pic.twitter.com/lkH7ET0jRJ
A todo esto, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha aprovechado para cachondearse del presidente del Gobierno Pedro Sánchez sobre su conversación con Rutte: "El desmentido de ayer del secretario general de la OTAN es uno de los mayores ridículos internacionales de la política exterior y de la política de defensa que jamás ha cometido España".