La cacería contra Ayuso continúa
El novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha interpuesto una querella contra la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez Fernández, y contra el fiscal de delitos económicos Julián Salto por delito de revelación de secretos ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Y merece la pena recordar que Rodríguez, ¡Oh, casualidad!, fue directora general de Justicia con Zapatero, ex directora general en el Ministerio de Justicia con Zapatero, fiscal adscrita a la Unión Progresista de Fiscales (UPF), como el Fiscal General, Álvaro García Ortiz, y entre 2004 y 2009 fue asesora en la Dirección General de Relaciones con la Administración de Justicia, posteriormente, directora general de Modernización de la Administración de Justicia.
Su presidente, Celso Rodríguez Padrón, ha asumido la ponencia de la causa, y la denuncia ha sido trasladad a la Fiscalía Superior de Madrid para que se admita o no a trámite, de ser aceptada se llegaría a un proceso penal contra Rodríguez y Santo que podría conllevar penas de cárcel.
Recuerden que la misma Fiscalía de la Audiencia Nacional emitiera un comunicado concluyendo que González era un defraudador y que la a magistrada titular del Juzgado de Instrucción nº 19 de Madrid abrió diligencias previas por dos presuntos delitos, defraudación tributaria y un presunto delito de falsedad en documento mercantil, contra el novio de Ayuso, y otros cuatro empresarios.
Y es que la cacería contra Ayuso continúa, nueva muestra de ello fue el discurso de ayer de la ministra portavoz Pilar Alegría, el juez ha archivado el caso de Mónica Oltra, exvicepresidenta de Compromís porque no ve indicios de delito. Ojo, el delito lo cometió su ex marido, que abusó sexualmente de una menor tutelada por el gobierno valenciano que vicepresidía la propia Oltra.
Pero la declaración de inocencia de Otra ha servido para 'hacer justicia', pobre, fue tratada injustamente por la derecha... todo ello lo dice tras atacar a Ayuso, por un crimen, que además de ser mucho menos grave, aún no está demostrado y que encima también fue cometido por su pareja, es más, cuando todavía no eran pareja.
