El País Vasco celebrará elecciones autonómicas el próximo 21 de abril, según anunció el actual lehendakari, Íñigo Urkullu (PNV). 

Ayer jueves se dio el pistoletazo de salida a la campaña electoral. 

En las últimas elecciones, el PNV sacó 31 escaños. EH Bildu 21. El PSOE 10. El PP 6. Podemos 6. Y Vox, 1.

Actualmente gobierna el País Vasco una coalición entre PNV (31) y PSOE (10).

De un total de 75 diputados, la mayoría absoluta se sitúa en 38.

La última encuesta -elaborada por Aztiker, publicada por Naiz y recogida por Electomanía-  da a EH Bildu entre 28-30 escaños. Al PNV, entre 26-28. Al PSOE, entre 11 y 12. Al PP, entre 6 y 7. Sumar se llevaría 1-2. Elkarri Podemos 1-2. Y Vox, 0-1. 

Así las cosas, el PSOE volverá ser decisivo a la hora de decidir a quién dejará gobernar. Lo más probable es que Pedro Sánchez vuelva a pactar con el PNV. Eso sí: a cambio de un pacto de legislatura, es decir, de que los 5 diputados del PNV le sigan apoyando, en las votaciones más relevantes, presupuestos incluidos. 

Por su parte, el líder supremo de EH Bildu, Arnaldo Otegi, ofreció ayer al PNV "un gobierno entre abertzales". Otra cosa es que el PNV le haga caso, porque en el arranque de campaña, su candidato, Imanol Pradales, llamó a "elegir entre dos modelos"; entre "un futuro mejor o peor para Euskadi", ya que "el actual bienestar está en juego" y que "todo lo construido puede agrietarse". "Si queremos un mejor futuro, hay que elegir experiencia, estabilidad, confianza y certidumbre. Hay que elegir PNV".

Es decir, que la estrategia del PNV es advertir que si gobernase EH Bildu, toda la prosperidad conseguida durante su larga etapa de gobierno en Euskadi se vería amenazada por la incompetencia e inexperiencia de los bildutarras. Esto no suena mucho a acuerdo, la verdad… 

Además del alto coste político que pactar con una coalición en la que se integra Batasuna, brazo político de ETA, sigue teniendo, también en el País Vasco, tanto para el PNV como para el PSOE...

Relacionado