En las últimas encuestas veíamos un cambio de tendencia: en Moncloa ya celebraban el frenazo del efecto Feijóo y la poca visibilidad de Vox, Pedro Sánchez volvía a verse presidente. Pero la polémica de la Ley 'solo sí es sí', la reforma del delito de sedición y sus decisiones y cesiones a podemitas, comunistas, independentistas y pro etarras pasan factura a Sánchez y a Podemos: Feijóo y Abascal recuperan la absoluta. O dicho en otras palabras, Feijóo no termina de convencer a los españoles, pero Juan Español tampoco es tonto, y sabe que Sánchez está inmerso en un ciclo de barbaridades por conservar el poder. 

A la vista del baile de cifras, es bueno recordar los resultados de las últimas elecciones generales celebradas el 10 de noviembre de 2019: el PSOE sacó 120 escaños y el 28% de los votos. El PP, 89 y el 20,8%, Vox, 52 y el 15,1%, Podemos, 35 y el 12,8% y Ciudadanos, 10 y el 6,8%.

Según la encuesta realizada por GAD3 para ABC, recogida por electomanía, los populares ganarían las elecciones con 141 escaños, sumados a los 41 que obtendrían los de Abascal: conseguirían con holgura la mayoría absoluta, situada en 176 escaños, pese a la gran caída de Vox. 

Los españoles castigan a Sánchez, aunque no sabemos por cuánto tiempo, y se queda con 109 diputados, perdiendo 11 escaños. Podemos protagoniza otra espectacular caída y obtendría 19 asientos en el hemiciclo, su desgobierno y crisis con Yolandísima, hace que los votantes de izquierdan huyan. Los socios comunistas, proetarras e independentistas de Sánchez, se mantienen, Junts sacaría 7, PNV se quedaría con 6, ERC con 13, Bildu obtendría 5, CUP con 2 y Más País con 3 diputados.

Según los datos, nos libraríamos de otros cuatro años de gobierno progresista de Sánchez, pero cuidado, porque lo que ha hecho hoy, se olvida mañana, y Feijóo y Abascal no terminan de despegar. No está todo ganado para los populares ni para Vox.