El conjunto monumental del Valle de los Caídos, que integra, entre otros, la Cruz, la Abadía benedictina, la Basílica de la Santa Cruz del Valle o la Hospedería, ha sido foco de las más diversas mentiras y patrañas históricas. Desde Hispanidad lo hemos denunciado: Sánchez está obsesionado con derribar la cruz, "esa horrible cruz", como dijo la socialista Carmen Calvo. El plan también pasa por la expulsión de la comunidad benedictina a cuyo frente está el prior Santiago Cantera, aunque ahí siguen resistiendo estoicamente, pese a no haber recibido ni un euro, de los que les corresponde, para la conservación de la Abadía. Las exhumaciones también están en el punto de mira del Gobierno, aunque como recogió Hispanidad, están paralizadas puesto que menos de 60 familias han pedido exhumar restos de sus familiares... frente a 212 familias que han pedido que no se toque a los suyos. 

Todo parecía en suspense, dos años y medio después de la exhumación de Franco, ni el Valle se había “resignificado” como exigía Podemos, ni los benedictinos se habían marchado, ni la cruz se había derribado, ni otros huesos se habían exhumado… Pero la aprobación hace unas semanas la Ley de Memoria Democrática, hace que el Valle de los Caídos vuelva a estar en serio peligro, si es que alguna vez ha dejado de estarlo, porque si algo es este Gobierno es cruzfóbico y cristófobo. 

Si se incluye la Cruz del Valle de los Caídos en esas cruces protegidas dependerá de los técnicos, que tendrán que determinar su valor patrimonial

Y Ayuso parece haberse puesto las pilas para intentar salvar la que es la cruz más grande del mundo. Así el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado una iniciativa para proteger la Cruz del Valle de los Caídos en la futura Ley de Patrimonio Cultural que se debate este jueves en la Asamblea de Madrid. Este proyecto de ley incluye en su artículo 73c como bienes del patrimonio etnográfico "la arquitectura religiosa, incluyendo los calvarios tradicionales y las cruces, así como los elementos decorativos y bienes muebles relacionados directamente con el bien patrimonial a proteger". 

Es decir, se estable un nuevo tipo de patrimonio, denominado etnográfico, que busca garantizar la conservación y enriquecimiento de los bienes culturales regionales. Dentro del mismo se incluyen "todos los bienes muebles, inmuebles, inmateriales, espacios o elementos que constituyan testimonio y expresión significativos de la identidad, la cultura y las formas de vida tradicionales de la Comunidad de Madrid". Si se incluye la Cruz del Valle de los Caídos en esas cruces protegidas dependerá de los técnicos, que tendrán que determinar su valor patrimonial.

Como hemos mencionado anteriormente, hoy jueves se inicia el debate de las enmiendas a la totalidad, de superar este paso, la ley deberá estar aprobada antes de mayo de 2023.