Madrid tiene 6,8 millones de vecinos, probablemente. En un país que crece a razón de medio millón de personas por año, es casi seguro que la mitad están en Madrid.

Por tanto, el principal problema ciudadano de la capital de España, más que en cualquier otra capital española, es la vivienda. Problema de Madrid y problema de Ayuso, porque como no haga algo, o parezca que hace algo, la cosa va a ir a más. 

Y ojo, una comunidad no puede lanzar un plan de vivienda ambicioso si el Gobierno central no ayuda. No se engañen: Sánchez prefiere que la crisis de vivienda se agudice en Madrid antes que colaborar en el triunfo de su principal enemigo político.

Ayuso tiene que urbanizar suelo a gran velocidad y convertirse en el adalid de la propiedad privada. Esto último resulta más teórico que práctico por la misma razón antedicha: el Gobierno central es mucho más poderoso, no ya que una comunidad autónoma, sino que la suma de las 17 regiones... pero les aseguro que no hay nada más práctico que una buena teoría.

Lo dicho: el problema de Madrid, y de Ayuso, es la vivienda.