Convención del PP. Toda una semana por delante Pablo Casado inaugura la reunión con Mariano Rajoy. Todo delicadeza, el expresidente del Gobierno concluye su parlamento con la afirmación de que, al igual que él arregló el desastre Zapatero, “supongo que serás tú quien tendrás que arreglar” el desastre Sánchez.

¿Cómo que supones, campeón? Si alguien del PP va a llegar a La Moncloa será el actual presidente del PP, de nombre Pablo Casado. ¿O es que piensas cambiarlo?

En cualquier caso, Pablo Casado va bien en las encuestas pero muchos temen que no por méritos propios sino por el desastre del Gobierno Sánchez.

Ya con Aznar el PP se convirtió en un partido de derechas y se alejó, del todo, de sus raíces cristianas. Ahora habrá que gritarle lo mismo que Juan Pablo II le gritó a Europa, ya en 1982: sé tú misma, recupera tus raíces cristianas.

Además, en economía no basta con ser un poco menos socialista que el PSOE y, en cualquier caso, el problema de Casado es su propia inconsistencia. La prueba del nueve: intenten definir ideológicamente al presidente del PP. No es fácil.