La ministra Darias, otro loro parlante: amenaza con superar en Illa en hablar mucho y no contar nada
Imaginemos, sólo por un momento, que más allá de su ambición personal, socialistas y podemitas se preocuparan realmente por los españoles. Sí, comprendo que tamaña hipótesis de trabajo conlleva un esfuerzo hercúleo de imaginación, pero intentémoslo. La patria nos lo agradecerá.
Es entonces cuando aparece la ministra de las autonomías, la canaria Carolina Darias, para contarnos que la administración pública, o sea, ella misma, va a ser la “palanca de recuperación” de España tras la crisis económica.
Pues entonces estamos fritos. Me recuerda las ocho palabras terribles, las peores de todas, a la que aludía el entonces presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan: “Soy del Gobierno y he venido para ayudar”. Cuando eso ocurre, queridos amigos, comienza la tragedia.
El Ejecutivo de Pedro Sánchez debiera convencerse de que el único papel de la administración pública consiste en no incordiar a los particulares.
Así que, cuando oigan hablar de los proyectos del dinero europeo, de la digitalización de España, de la nueva economía, incluso de la transición verde, no entren en si son buenas o malas ideas. Más bien piensen en cómo puede usted ponerlas en práctica. Porque a los políticos lo único que se les ocurre es meterle la mano en la faltriquera... y apuntarse su éxito en caso de que triunfe, que no su desastre en caso de que fracase.
Los políticos jamás ayudan a la economía, pero pueden molestar mucho a las economías.