Se llama Gerardo Sanz y el domingo anunció su dimisión como alcalde de Llanera (Asturias), por razones personales, obviamente, y arremetió contra el Gobierno del Principado de Asturias, del también socialista Adrián Barbón. El público estaba formado mayoritariamente por ganaderos que participaban era el 50 Concurso Exposición de Ganado Vacuno.
“Y os tengo que decir, os tengo que recomendar, que os unáis. Que os unáis en el sector primario, que os unáis y que no esperéis que la política os solucione los problemas que tiene el sector primario. Lo tenéis que solucionar vosotros, os tenéis que unir vosotros contra esta política que no sabe, que no siente el medio rural. Eso es lo que pasa en Asturias. Qué pena, qué pena me da”, afirmó.
Su crítica iba dirigida contra el Gobierno de su colega, Barbón, naturalmente, y eso ya es noticiable. Ahora bien, más sorprendente resultan sus palabras si tenemos en cuenta que ha estado una década al frente del Ayuntamiento de Llanera. ¿Está justificando su fracaso como alcalde? Eso parece, bajo la máxima de que la mejor defensa es un buen ataque.
En cualquier caso, podría haber avisado a sus vecinos antes de ser alcalde.










