Distingamos: el odio es especialidad del comunista Pablo Iglesias, el rencor, mucho más peligroso, de patrimonio de Pedro Sánchez (en la imagen). Y el resentimiento es el camino por el que Zapaterín, probable futuro presidente de España. Sánchez declaraba a El País lo del odio y rencor de Iglesias hacia el PSOE. No hombre, no lo del rencor es cosa tuya. Iglesias no es en sentido: es violento, pero no resentido. Y por ahora se trata de un odio melodramático. Hispanidad redaccion@hispanidad.com