El Gobierno zapateril, para el año que viene, considera 32 días de fiesta, 15 de los cuales son de carácter religioso. Parece que eso contradice un poco la propuesta reciente de rechazar una placa a la Madre Maravillas en el Congreso, y la verdad, no queremos un Gobierno sin ideas o que mienta según le plaza.

Sr. Director:

Estando de acuerdo con sus habituales asertos sobre la cristofobia que nos rodea le invito a que repase el BOE del lunes o martes de esta semana y lea sin especial "inquina" el calendario laboral para el año 2009 que acaba de publicar el Gobierno del Sr. Zapatero.

Salen 32 días de fiesta, unos de ámbito nacional y otros no, pero no es eso en lo que requiero su atención, es que de esos 32 días de fiesta, 15, sí, nada y nada menos que 15 están referidos a la religión católica (Corpus Christi, Epifanía, todos los Santos, la Inmaculada, Natividad,...) y me he quedado perplejo.

¿Acaso no estamos en un estado laico?, ¿acaso no predica este Gobierno que nos debemos guardar nuestras creencias en nuestros bolsillos? ¿No acaban de echar abajo los Sres, (y Sras...para que no se mosquee Aído) diputados la propuesta de poner una placa en el edificio del Congreso porque la "proponida" era monja... católica y, por tanto, daba igual todo el bien "social" que hizo por lo pobres?

Yo, personalmente como creyente, estoy encantado, pero a su vez, como ciudadano, querría que mi presidente fuese coherente con su discurso y tuviese "lo que hay que tener" para suprimir tales festivos, por otros de nula significancia religiosa.

Sé que no lo hace porque sabe que el pueblo, los que le votan, no lo aceptarían (unos pocos sí....claro.....los de los medios de comunicación que controla y demás periodistas a los que el relativismo radical les da audiencia) pero entonces deberíamos decirle a la cara que nos ha mentido, que nos está mintiendo y ningún país se merece un presidente que le mienta (digo presidente pero lo extiendo a su partido, sus portavoces, Congreso, Senado, y por supuesto a la oposición, que bien calladita se queda siempre).

Posdata; si hay ley de igualdad...¿por qué se siguen discriminando los urinarios públicos entre hombres y mujeres?

Rafael Llorente

llorente@llorenteasociados.com