The Host (La Huesped) es la nueva apuesta literaria de Stephanie Meyers llevada al cine, que cambia a los jóvenes y atractivos vampiros de la saga Crepúsculo por alienígenas.
Como ocurría en el clásico de ciencia ficción: La invasión de los ladrones de cuerpos, en The Host una raza alienígena se ha hecho con el control de la Tierra introduciéndose en el cuerpo de los humanos. Hasta que el alma de una joven miembro de la resistencia, Melanie, se niega a desaparecer y se convierte en incómodo huésped de la extraterrestre Wanderer…
Resulta curioso que detrás de este film de ciencia ficción de baja calidad se encuentre Andrew Niccol, un director al que le debemos películas tan geniales como Gattaca o tan entretenidas como In Time. Pero, nos tememos que Niccol ha tenido poco margen de maniobra con un argumento tan mediocre como el de The Host. Lo mismo ocurre con las actrices principales: Saoirse Roman y Diane Kruger que hacen lo que pueden en sus respectivos papeles. Porque en esta historia el duelo de almas por hacerse con el control de un cuerpo resulta banal y lioso porque Stephanie Meyers, fiel a su estilo, se preocupa más de los dos romances que sobrelleva el cuerpo de Melanie/Wanderer, que, en su puerilidad, producen la carcajada.
¿Seguirá Stephanie Meyers forrándose gracias a esta nueva trilogía literaria y cinematográfica En este caso los adolescentes tienen la palabra.
Para: Adolescentes que les gusten las historias liosas y almibaradas