- Profunda decepción en el sector eléctrico, que se derrumba en bolsa. Y eso que todavía no se han hecho las cuentas.
- Otro fracaso anunciado del ministro Soria: no termina con el déficit de tarifa y propicia una luz más cara.
- Al final, serán los consumidores quienes paguen el déficit eléctrico. Nuevos peajes y subastas con energías más gravadas implicarán una luz más cara… por más que el Gobierno lo niegue.
- Y el problema de fondo de la onerosa energía solar continúa sigue vigente.
- Un detalle: el Ejecutivo Rajoy no se ha atrevido con el coste de la ininterrumpibilidad, que bien podía haber suprimido. ¿Por qué Porque se enfadaría la multinacional norteamericana ALCOA, la gran beneficiaria.
¿Quién es el más beneficiado por la reforma eléctrica que, a primera hora de la tarde del viernes 12, presentaba en Moncloa, el ministro de Energía, José Manuel Soria (En la imagen). El más beneficiado es el Gobierno, quien se ha evadido de pagar unos 2.000 millones de euros para reducir el déficit de tarifa eléctrico. Los perjudicados han sido, en primer lugar, las empresas generadoras; en segundo, los consumidores.
Las víctimas son muchas pero pueden agruparse en dos: empresas y ciudadanos. Las primeras con impacto frontal y explosivo (vean la cotización de bolsa). La segunda, la ciudadanía con espoleta de efecto retardado.
Para ser exactos las dos compañías más perjudicadas han sido la dos grandes eléctricas españolas: Iberdrola y Gas Natural Fenosa. La catalana, por los ciclos combinados cuya remuneración ha reducido el Gobierno hasta la médula: lo ha divididos por 2,5. Iberdrola también tiene ciclo combinado, pero no menos distribución, uno de los apartados más golpeados por la reforma. Por eso, Red Eléctrica Española (REE) también se da un importante batacazo.
La tercera más perjudicada es Acciona, aunque en términos relativos la compañía de los Entrecanales resulte la más vapuleada en términos relativos por la sencilla razón de que la constructora se ha convertido en una eléctrica… eólica y solar.
También Endesa, porque el Gobierno ha decidido ahorrarse 900 millones en costes extra peninsulares, y eso repercute en la empresa italiana.
El ministro Soria aseguraba a Hispanidad que el mordisco va a ser muy similar para las renovables y para el ciclo combinado. Es decir, para las dos grandes productoras de energía verde, las dos modas, una que ya data de hace 20 años, otra de 10.
Al final, profunda decepción en el sector eléctrico, que se derrumba en bolsa. Y eso que todavía no se han hecho las cuentas finales.
Pero la reforma Soria es algo más. Es otro fracaso anunciado del ministro: no termina con el déficit de tarifa y propicia una luz más cara.
Sí, al final serán los consumidores quienes paguen el déficit eléctrico. Nuevos peajes y subastas con energías más gravadas implicarán una luz más cara… por más que el Gobierno lo niegue. Soria insiste en que, para remediar el déficit de tarifa habría que haber subido la luz un 40% mientras que ahora subirá el 3%. No se lo cree ni él. Si usted sigue poniendo peajes, si los costes continúan superando a los ingresos, y encima hablamos de unos impuestos crecientes, es evidente que la consecuencia lógica será la subida, sólo que paulatina, paulatinamente acelerada, del precio de la luz.
Y el problema de fondo de la onerosa energía solar continúa vigente. Se le recorta la retribución, sí, pero es que el problema de la puñetera energía verde, que nos lleva directamente a la miseria, no es ya de coste, es de algo mucho peor: de sobreoferta, contabilidad anunciada para ciclos de 25 años. Vamos, como si te casaras con ella.
Y no sólo son las renovables donde se puede meter el tajo. Un detalle: el Ejecutivo Rajoy no se ha atrevido con el coste de la ininterrumpibilidad, que bien podía haber suprimido. ¿Por qué Porque se enfadaría la multinacional norteamericana ALCOA, la gran beneficiaria.
Por cierto, Soria repite que con esta reforma se acaba con el déficit de tarifa. ¿A que no
Miriam Prat
miriam@hispanidad.com