Los SMS son ya un hervidero. "Compra en tu quiosco el nuevo semanario católico Alba. Tenemos por fin lo que necesitábamos. Compra varios y te lo agradecerán. ¡Pásalo!". Así reza uno de los SMS que estos días circulan por España ante la expectativa levantada con el nacimiento del semanario católico Alba. Se distribuirá en 8.000 puntos de venta y tiene una tirada inicial de 25.000 ejemplares.

"Los católicos se ven ridiculizados por los medios de comunicación", señala Andrés Rojo, redactor jefe del semanario. Y es que Alba aspira a ser referente de un catolicismo social en el que se identifican millones de españoles y que, sin embargo, no tienen referente mediático en soporte de papel. Y para empezar abriendo boca, Alba dedica su primera portada a los duros ataques del Gobierno ZP a la Iglesia. Además de realizar un resumen del rodillo socialista (asignatura de religión, divorcio-express, "matrimonio homosexual", etc), el semanario apunta al Manifiesto de Barcelona por la Laicidad como el polvo de estos lodos. Entonces, la Fundación Francesc Ferre i Guardia abogaba por denunciar los acuerdos Iglesia-Estado.

Al tiempo. Porque el Manifiesto de Barcelona por la Laicidad no fue un discurso intelectual, sino político. Pasqual Maragall y Josep Lluis Carod-Rovira forman parte de la Fundación Francesc Ferre i Guardia, que dio cobijo al encuentro con un resultado que hace meses volvió a repetirse en un seminario sobre laicidad en Cádiz.

Por lo demás, el director del semanario, Carlos Esteban, afirma en la presentación de la publicación que "el periodismo es la más cristiana de las profesiones". Eso es dignificar la profesión. Es más, añade Esteban, "el cristianismo es periodismo porque es la única religión que se basa en un Acontecimiento". Lenguaje "celino" que, para quien no lo entienda, se lo traducimos: El cristianismo no es una doctrina, sino una persona, Cristo, Hijo de Dios y Salvador, "humanizado" a través del Acontecimiento de la Encarnación.

Desde Hispanidad.com les deseamos todos los éxitos a esta nueva publicación del Grupo Intereconomía. Información rigurosa y opinión afiliada tratarán de poner fin al "apagón informativo" del pueblo católico. ¡Enhorabuena!