Uno de ellos era franciscano, la primera vez que se expulsa a un católico de Marruecos en muchos años

 

La fidelidad del régimen marroquí deja mucho que desear. España tira la casa por la ventana en la cumbre hispano-marroquí con la presencia de tropecientos ministros mientras que por parte marroquí no acude Mohamed VI. Y sin la presencia real, no hay nada. El Gobierno es un Gobierno títere, como todo el mundo sabe. Así que -otra vez- el Gobierno vuelve a hacer el ridículo.

Pero hay más: Marruecos aprovecha la distracción de celebración de la Cumbre de Granada para expulsar a 26 cristianos el pasado fin de semana. ¡Toma libertad religiosa! ¡Toma reciprocidad! Y lo más llamativo: uno de los expulsados es un franciscano. Es la primera vez en mucho tiempo que Marruecos expulsa de su país a un católico. Eso para avalar la normalidad de las relaciones.