Sr. Director:
El Vicariato de Roma se ha negado a ceder dos iglesias católicas para el rodaje de la adaptación al cine de la 2ª novela de Dan Brown.

Sólo faltaría. Hoy el ultraje a la Iglesia y la denigración de la realidad histórica de Jesucristo, coordina a la perfección el descaro hacia lo sagrado con una extraña ausencia de pudor hacia el agredido a la hora de demandarle un favor.

El año paulino está al caer, recordándonos que San Pablo fue primero Saulo, un gran enemigo de la Iglesia y que la amonestación de Cristo: "Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? hizo de él uno de los más grandes conversos al cristianismo.

Ojalá los nuevos asaltantes de lo católico merecieran la gracia de comprender que perseguir a la Iglesia es perseguir al mismo Jesús.

Lisa Justiniano

Juslis7@gmail.com