Mientras el Gobierno portugués paraliza a Iberdrola en el capital de la eléctrica EDP, la eléctrica pública lusa ha tomado ya el control definitivo de Hidrocantábrico (HC), la cuarta eléctrica española, con sede oficial en Oviedo.
El Gobierno socialista asturiano y Cajastur, controlada por el primero, así como el entonces ministro de Economía, Rodrigo Rato, se opusieron a que Unión Fenosa tomara HC, una eléctrica española. Sin embargo, al mismo tiempo, el Gobierno portugués continúa paralizando a Iberdrola, propietaria de un 5% de EDP, y utiliza a su brazo financiero, Caixa Geral, para frenar a la española.