La identidad real de Spider-Man es revelada en el mundo entero, por primera vez, poniendo en peligro al superhéroe de 17 años y a sus seres queridos, más aún cuando alguna de sus acciones es cuestionada. Eso les impide la entrada en la universidad que habían elegido a Peter, MJ y Ned (a los que la prensa apoda como sus cómplices). Será entonces cuando Peter pide al doctor  Doctor Strange que restaure su secreto pero, cuando el famoso mago empieza a lanzar el hechizo, Peter la lía cuando se retracta de que sus amigos y parientes se olviden de su segunda personalidad, lo que dará lugar a que  se cuelen seres de todos los universos paralelos que conocen su identidad secreta, incluidos villanos muy poderosos con los que no se ha enfrentado jamás. Algo que no alterará no solo su futuro sino también el del Multiverso.   

En una franquicia que ha tenido hasta el momento tres actores diferentes que han encarnado a Spiderman, en acción real, se planteaba complicado una nueva entrega de argumento original. Pero sus responsables lo han conseguido arriesgándose con una trama entretenida, pero muy enrevesada, donde el multiverso (entendido como universos paralelos)  tiene total relevancia.

Varias sorpresas que encierra esta película fantástica, de duración demasiado extensa (148 minutos de metraje) y con algún altibajo de ritmo hacia la mitad, impide contar demasiados datos para no desvelar spoilers. Lo que si puede adelantarse es que resulta una de las apuestas cinematográficas más espectaculares que hemos visto en efectos visuales. Tal es así, que

Los auténticos forofos del super héroe arácnido apreciarán que este film tiene más semejanzas con la divertidísima película animada del año 2018, Spiderman: Un nuevo universo, que con las otras dos películas anteriores protagonizadas por Holland: Spider-Man.. Homecoming (2017) y Spider-Man. Lejos de casa (2019).

Con un claro homenaje a toda la franquicia, sigue la estela de las películas protagonizadas por este actor británico donde tiene un peso importante un humor “teenager” que ha conquistado a las nuevas generaciones, que engloba unos diálogos ingeniosos y unas secuencias de acción enloquecidas. A lo que se suma  una apuesta por la redención de algunos personajes dándoles una segunda oportunidad, y la constatación de que la bondad respecto a los semejantes siempre da lugar a la paz interior.

De nuevo la amistad y el amor de los personajes que rodean a Peter Parker, es decir,  MJ, Ned, May y Happy (interpretados por Zendaya, Jacob Batalon, Marisa Tomey y Jon Favreau) es decisivo para que este Spiderman sea el menos solitario de todas las sagas.

Para: los que sean unos forofos de héroe arácnido y hayan visto todas las películas de Spiderman.