- Sólo un 15% respaldaría la permanencia del mandatario en el referéndum revocatorio. Por eso quiere tumbar la iniciativa.
- Además, el 93% de la población cree que la situación del país es "muy mala".
- Y más sorprendente: sólo un 20% se sigue considerando chavista, menos de la mitad que hace tres años.
- La oposición, preocupada, quiere que el plebiscito se celebre y pide ayuda a la Organización de Estados Americanos (OEA).
Nicolás Maduro está contra las cuerdas ante el desplome de su apoyo popular.
La mayoría de la población quiere que se largue. Esto es lo que votaría hasta el 73% de los venezolanos en un eventual
plebiscito revocatorio para decidir su continuidad. El respaldo a su permanencia en el poder queda relegado al 15%, según una encuesta de la firma
Alfredo Keller y Asociados. El desagrado hacia la gestión del mandatario alcanza al 75% de la sociedad.
Los venezolanos ya no albergan dudas sobre la situación de su país.
Venezuela está "muy mal", opina el 93% de la población. La solución podría proceder, precisamente, de la
marcha del mandatario Maduro y la convocatoria de
nuevas elecciones. Un 67% cree que esto marcaría el punto de partida para empezar a salir de su profunda crisis.
Ante este escenario, ¿quién se sigue considerando
chavista en Venezuela? Según el sondeo, un 20% de la población. En 2013, tras la llegada de Nicolás Maduro al poder, la proporción era del 45%. Ahora es menos de la mitad. Pero esto no disuade al mandatario, que ha confiado el rumbo económico del país a
Alfredo Serrano, un individuo próximo a
Podemos que representa el ala más dura del chavismo.
Estos datos ayudan a entender los intentos reiterados del régimen en torpedear el proceso que debe culminar con la
convocatoria del referéndum. Se lo decíamos en
Hispanidad: la opositora
Mesa de Unidad Democrática (MUD) ya descarta que el plebiscito pueda celebrarse en 2016, debido a la
lentitud del procedimiento y la
falta de presupuesto. La trampa es la siguiente: si el referéndum se realiza antes del 10 de enero de 2017 y Maduro pierde, hay elecciones. Pero si lo convocan más tarde, el mandatario será sustituido por su vicepresidente si lo revocan.
Por eso la oposición está haciendo lo posible para que se haga en 2016. Lo último que sabemos es que acudirá a la
Organización de Estados Americanos (OEA), donde presentará una denuncia contra las autoridades de Venezuela por bloquear el proceso. El
Consejo Nacional Electoral (CNE) "viola la Constitución y no da la fecha del revocatorio, derecho constitucional de los venezolanos. Aún estamos a tiempo de que se convoque el referendo. Por tal motivo solicitaremos a la OEA alzar su voz", recoge el
documento.
A tal fin, el opositor
Luis Florino ha viajado a
Washington para reunirse este jueves con
Luis Almagro, secretario general de la OEA.
Daniel Esparza