• Y eso a pesar de que ha sido un año bursátil difícil (Brexit).
  • El presidente llegará a la Junta con un buen balance, al menos medido según el valor de la compañía.
  • En términos de capitalización, 51.159 millones, 5.164 millones más que en abril de 2016.
  • Para defender la cotización se ha reunido con analistas, gestoras y fondos de inversión.
  • Mucho tiempo y muchos viajes, dejando el día a día en manos de sus colaboradores más próximos.
A José María Álvarez-Pallete (en la imagen) le queda un mes para cumplir su primer año como presidente de Telefónica pero, ojo, se acerca a esa fecha con una fijación: que la acción cotice bastante por arriba de los 9,31 euros con los que se inició su mandato, el 8 de abril de 2016. Ese será, piensa, la mejor referencia para ofrecer un buen balance de su primer aniversario. Este martes 7 cerró a 10,14 euros ( 10,55%) Es el logro que presentará al consejo de administración y, sobre todo, a la junta de accionistas y al mercado, en mayo o junio. La fecha depende de una decisión tomada sobre la filial británica O2, cuya venta bloqueó Bruselas. De momento, la acción cotiza por encima de la cota de los 10 euros. Pero en ese logro han tenido que ver tanto la mejora en las recomendaciones de los analistas, como el empeño del propio Pallete, que se ha lanzado a una road show particular para convencer a analistas y fondos de inversión sobre el potencial de Telefónica. Han sido reuniones al uso, en plazas financieras concretas y ante una tropa de analistas, pero citas concretas, gestora a gestora, fondo a fondo. Y no le ha llevado poco tiempo ni pocos viajes. Hasta tal punto ha sido así que ha dejado el día a día en manos de hombres de confianza, como Ángel Vila (director financiero) o Guillermo Ansaldo (director de Recursos). Ahora lo urgente es la cotización. Entre otras cosas, porque es el origen de la reducción del apalancamiento y del mantenimiento de la inversión. Y así, la capitalización se sitúa ya por encima de los 51.159 millones de euros, 5.164 millones más que en abril del año pasado (45.999 millones) y un 35,2% más que en junio, tras el Brexit, cuando la acción cotizaba a 7,66 euros. Unos meses después, en septiembre, se había revalorizado hasta 9,75 euros, pero a principios de diciembre volvió a caer hasta 7,5 euros. Desde entonces, no ha dejado de subir. En este momento, además, las recomendaciones han cambiado, la mayoría favorables a comprar y el consenso del mercado sitúa el valor de las acciones más allá del valor al que cotiza. Paradigmático el caso de Merrill Lynch, que subió el precio objetivo de Telefónica, a principios de mes, de 8,3 a 10,8 euros por acción tras meses de resistencia. Pero no sólo es Merrill Lynch. A ese carro se han apuntado también otros como JP Morgan o Citigroup. Miran con mejores ojos lo que antes veían como un lastre: la deuda sobre todo, cuya situación mejoraba en las últimas cuentas anuales y lo hará más tras la venta del 40% de Telxius. Queda la solución a la británica O2 pero Álvarez-Pallete acelera una solución, con venta total o parcial. Rafael Esparza