Renault lanza su nouvelle vague (nueva ola) para liderar la transición energética en Europa a partir de 2030, siendo la marca más ‘verde’ del continente, cuando con 9 de cada 10 coches que venda estarán electrificados. Eso sí, lo hará sin renunciar al motor de combustión (diesel y gasolina), por ahora: “Dependerá del debate normativo y de la perspectiva geográfica”, ha señalado el CEO de la marca francesa y del grupo automovilístico al que da nombre, Luca de Meo. “Estamos preparados para todo”, ha añadido.

El grupo Renault está inmerso en su ‘Renaulution’ y la icónica marca francesa del rombo no se queda atrás: con su nouvelle vague, quiere ser más moderna, verde, tecnológica y sostenible. Y tiene buenos mimbres, pues es líder en el mercado europeo en coche eléctrico desde hace más de 10 años, con 400.000 vendidos. Asimismo, tiene más ambiciones, como la de ser puntera en tecnología y servicios, gracias al ‘Software Republique’, un ecosistema abierto con más de 2.000 ingenieros de cinco empresas líderes de sus sectores. Además, quiere ser el constructor de coches con mayor porcentaje de materiales reciclados en nuevos vehículos: quiere renovar y reciclar 120.000 coches al año en Re-Factory, el primer hub europeo de economía circular.

Renault quiere ser el constructor de coches con mayor porcentaje de materiales reciclados en nuevos vehículos: quiere renovar y reciclar 120.000 coches al año en Re-Factory

A todo esto se suma el cambio de prioridades que ha impulsando De Meo, dando prioridad a la rentabilidad frente a los volúmenes. Por ello, se opta por una estrategia comercial centrada en el valor. El director de Ventas y Operaciones de la marca Renault, Fabrice Cambolive, ha destacado que junto a la ofensiva verde con vehículos electrificados y el impulso de la ofensiva E-Tech, se suma la renovación de la gama de productos, destacando la reconquista del segmento C, y la concentración de los esfuerzos en la calidad de las ventas y el posicionamiento de precio.

A escala internacional, la marca Renault invierte en sus mercados históricos con fuerte potencial y alto nivel de localización: Brasil, Rusia, Turquía e India, al tiempo que controla riesgos. Mientras en Europa, se basa en sus mercados principales: Francia, España, Italia, Alemania y Reino Unido. Y por cierto, en nuestro país también ha reforzado su actividad industrial

La marca francesa apuesta por un logo más “abierto, transparente e inclusivo”, reflejando “la unión de múltiples principios”, y una nueva identidad de marca centrada en el amor y con guiños al pasado emblemático

Paralelamente, el cambio también llega al aspecto visual. La marca francesa ha renovado su logo, que tiene forma de rombo desde 1925, y cuya última versión se creó en 1992 y se retocó en 2015. Su director de diseño, Gilles Vidal, ha destacado que ahora es más “abierto, transparente e inclusivo”, reflejando “la unión de múltiples principios”. Y a esto le siguen grandes cambios en los interiores, apostando por la estética y la experiencia, a través de: alta tecnología, más espacio físico y rediseño de líneas, volúmenes y materiales.

Por su parte, Arnaud Belloni, director global marketing de la marca, ha referido la nueva identidad de marca, apostando por la creatividad y la modernidad con guiños al pasado emblemático. Y es que han querido “darle vida” a Renault, con una estrategia centrada en el “amor”, porque “con el amor viene el respeto a la marca”: si esta gusta, el cliente está dispuesto a pagar, pero si no gusta, pide descuentos, ha explicado Belloni. Por ello, también se recurre al atajo emocional, aludiendo a la relación de la marca con la Fórmula 1, a iconos como el Renault 5 y el Renault 4, o a canciones. Y todo ello, con un marketing “cálido, humano, moderno, militante y excelente”.