- El secretario de general del PSOE vira a la derecha pero sin descuidar la izquierda.
- Ahora está en el centralismo pero podría virar hacia Barcelona.
- El secretario general del PSOE trata de romper Podemos con Compromis.
- Antes, intentó marginar a Ciudadanos, ahora les necesita.
- Mientras, Iglesias revisa su bandeja de entrada… y hasta el 'spam'.
- Y Rajoy, que se aburre mucho, escribe artículos en El País.
Estos son mis principios, pero si no le gustan tengo otros. El lema de
Groucho Marx sirve para
Pedro Sánchez (
en la imagen), que ha pasado de estar a un tris de firmar un frente Popular con los comunistas de Podemos a ultimar un acuerdo con los
liberales de Ciudadanos. El partido que pactaba con la CUP en Badalona se ha convertido ahora en fiero defensor de la unidad de España que no quiere saber nada, ni tan siquiera con el grupo de la antigua convergencia, es decir,
la burguesía catalana.
De asegurar que lo primero que harían los socialistas en Moncloa era derogar la reforma laboral de
Fátima Báñez a discutir el contrato único por
Albert Rivera. Eso sí, el 'caca-culo-pedo-pis' progresía lo cumple a la perfección:
aborto, divorcio-exprés, gaymonio, eutanasia y persecución de la Iglesia y de la enseñanza católica… eso es lo único que no puede faltar.
Y por eso, porque sus principios son renovables e intercambiables, porque no creen en nada,
Sánchez asegura que dispondrá de los votos necesarios el 2 de marzo. Bueno, dos días después, el 4,
cuando pueda ser investido por mayoría simple.
La verdad es que nadie sabe cómo, porque hasta Ciudadanos, que puede perder a todos sus votantes con este paso,
asegura que no le apoyará pero se abstendrá, lo cual nos lleva a preguntarnos qué as oculta en la manga
Pedro Sánchez porque las cuentas no salen.
Mientras, los previsibles perdedores -al menos ahora mismo-
Pablo Iglesias y Mariano Rajoy, distraen sus ocios. Iglesias asegura que no le ha llegado a su correo la petición de Sánchez para recibirle. A lo mejor está en 'spam'.
Y
Rajoy ve Teledeporte y escribe artículos en El País. Asegura que hay que establecer un cordón sanitario con Podemos. Muy cierto, pero ya perdió su oportunidad. Además, en lo que debe pensar Rajoy es en marcharse.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com