Sebastián Albella
Jornada bursátil del martes 2 de julio. La empresa ENCE, la última del Ibex 35, es, sin embargo, un día más, la primera en contratación. Rota nada menos que el 1,98% de capital, mientras la siguiente Enagás, lo hace en un 0,59%. La media habitual oscila entre el 0,15 y el 0,20%.
¿Qué ocurre? Pues que los cortos han cogido a la empresa cuyos socios de referencia son los Urrutia, los Comenge y los Arregui, como un casino. Y eso que no tienen un capital flotante muy exagerado (ronda el 60%).
La jornada del martes, se contrató casi un 2% del capital (lo normal es que oscile entre el 0,15 y el 20%)
Pues bien, los bajistas, los fondos buitre, los depredadores, han conseguido que el valor se derrumbe, desde el pasado mes de octubre, que cotizaba a 8,6 euros hasta los actuales 3,2. Los bajistas se están forrando pagando sus deudas con acciones compradas a precios de risa.
En 9 meses, los depredadores han llevado el valor de 8,6 a 3,2 euros. Y Albella silbando
Y por cierto, el mayor tirón bajista comenzó días antes en que se conociera el allanamiento sobre su famosa planta contaminante de Pontevedra. ¿Hubo información confidencial? No se sabe.
Pero lo más llamativo es que la CNMV mira hacia otro lado. Sebastián Albella ni se entera ni quiere enterarse. ENCE se ha convertido en plastilina en manos de los especuladores de cortos. Pero Sebastián cree en el mercado, en ese mercado que consiste en dejar a la zorra que opere en el gallinero, a sus anchas.