En Bagdad, capital de Irak, se perpetraron este jueves dos atentados kamikaze en un mercado público de artículos y ropas de segunda mano en la Plaza de Tayarán, en el centro de la capital iraquí.

Los autorizados de seguridad iraquíes anunciaron la muerte de 32 personas tras el ataque que también dejó 110 víctimas con heridas.

La banda terrorista yihadista ‘Estado Islámico’ (DAESH) asumió la autoría del doble atentado suicida. El portavoz del Ministerio de Exteriores de Irak, Khalid Mihanna también había apuntado a DAESH como responsable del atentado suicida: “El DAESH está detrás de la explosión, aunque no ha asumido la autoría. Con este ataque, el DAESH quiso enviar el mensaje de que todavía existe”.

Y este doble atentado yihadista se produce a escasas fechas del viaje que el Papa Francisco tiene previsto realizar a Irak, desde el 5 hasta el 8 de marzo.

Precisamente, la oficina de Prensa de la Santa Sede publicó el telegrama de pésame enviado en nombre del papa Francisco, por el cardenal secretario de Estado Pietro Parolin al presidente de la República de Irak, Barham Salih.

Francisco ha recibido “con profunda tristeza” la noticia de los atentados con explosivos que tuvieron lugar en la plaza Tayaran de Bagdad. El Obispo de Roma “deplorando este acto insensato de brutalidad, –se lee en el telegrama– reza por las víctimas fallecidas y sus familias, por los heridos y por el personal de emergencia presente. Confiando en que todos seguirán trabajando para vencer la violencia con fraternidad, solidaridad y paz, el Papa Francisco invoca sobre la nación y su pueblo la bendición del Altísimo”.