El niño Alfie Evans, al que la justicia británica no quiere salvar.
El Tribunal Supremo de Inglaterra negó por tercera vez el recurso de amparo de los padres de Alfie Evans, y les negó la posibilidad de trasladar a su hijo a Italia para que reciba tratamiento médico.
“Esto representa el capítulo final del caso de este extraordinario niño pequeño”, dijo el juez Anthony Hayden, del Tribunal Supremo, según informó la BBC de Londres este 24 de abril, recoge Aciprensa.
Alfie tiene 23 meses de edad y permanece hospitalizado desde diciembre de 2016 en “estado semi-vegetativo” debido a una condición neurológica degenerativa desconocida.
Por el momento, Alfie permanece en el hospital Alder Hey en Liverpool. Los médicos le retiraron el soporte vital justo después de las 9:00 p.m. del 23 de abril. Sin embargo, en lugar de perder la vida, el pequeño comenzó a respirar por sí mismo. Luego de este tiempo, se le volvió a suministrar hidratación y oxígeno.
Italia le concedió la nacionalidad al pequeño este lunes y este país aún tiene un avión preparado con un equipo médico que podría viajar hasta la ciudad de Liverpool (Inglaterra) para trasladarlo a Roma e internarlo en el hospital Bambino Gesú de Roma, que depende del Vaticano.
Todavía no está claro cuántos días más pueda sobrevivir Alfie. Por el momento, ha desafiado toda expectativa para la medicina.
“Ya cerca de las 24 horas (de haber sido desconectado) y está peleando. No ha sido alimentado por 23 horas. ¿Es esto humano? ¿En dónde yace su dignidad?”, denunció su padre, Thomas Evans, en redes sociales.
El 23 de abril Papa Francisco se pronunció desde su cuenta de Twitter. “Conmovido por las oraciones y la amplia solidaridad en favor del pequeño Alfie Evans, renuevo mi llamamiento para que se escuche el sufrimiento de sus padres y se cumpla su deseo de intentar nuevas posibilidades de tratamiento”, expresó.
Días antes, la presidenta del hospital pediátrico Bambino Gesú, Mariella Enoc, afirmó que el Papa Francisco le pidió “hacer lo posible y lo imposible” por Alfie.
el cardenal Elio Sgrecia, expresidente de la Academia Pontificia para la Vida, ha condenado duramente el totalitarismo que impide a los padres de Alfie Evans decidir sobre el futuro de su hijo.
Por su parte, el cardenal Elio Sgrecia, expresidente de la Academia Pontificia para la Vida, ha condenado duramente el totalitarismo que impide a los padres de Alfie Evans decidir sobre el futuro de su hijo.
El cardenal Sgreccia asegura en una entrevista que lo que está ocurriendo «es un ataque a la institución familiar. Todo se deriva del estatalismo, que se presenta en forma humanizada. Hace temblar a uno cuando recuerda lo que han hecho en los regímenes totalitarios», añade Infocatólica.
Asimismo, Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo, ha comparecido este martes en rueda de prensa en Bruselas junto al cardenal Gualtiero Bassetti, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, recoge Religión en Libertad.
El político, también italiano, ha defendido la postura de su país, en el caso Alfie Evans, que tras conceder la nacionalidad italiana al niño ha pedido al hospital de Liverpool que le retiró el soporte vital que le permita trasladarle a Roma para ser tratado allí.
la decisión del Hospital infantil Alder Hey de Liverpool de impedir reiteradamente que sea tratado en otro centro o trasladado a Italia ha levantado las críticas de una parte de los médicos británicos
Tajani ha pedido que se le dé “otra oportunidad a Alfi, el niño británico que ha sido desconectado”. Asimismo, ha asegurado que “tal vez podríamos intentar, sin ensañamiento terapéutico, salvarlo en Italia, en el Bambino Gesù”.
Además, la decisión del Hospital infantil Alder Hey de Liverpool de retirar el soporte vital a Alfie Evans y de impedir reiteradamente que sea tratado en otro centro o trasladado a Italia ha levantado las críticas de una parte de los médicos británicos, recoge Religión en Libertad.
The Medical Ethics Alliance (Alianza de Ética Médica) ha publicado una declaración realizada por médicos y a la que se están adhiriendo más profesionales sanitarios en la que aseguran que el Sistema Nacional de Salud británico en Liverpool ha colocado a Alfie en una “vía hacia la muerte” provocando el “descrédito” de la profesión médica.
En el fondo, a los que se niegan a que Alfie y sus padres luchen por su vida no les molesta el débil, sino la debilidad…