- Inaugurada en 2013 tras una inversión de 1.500 millones de euros, sólo produce la mitad de energía de la prevista.
- A los problemas económicos se unen los medio ambientales.
- Estados Unidos recela de la energía termosolar y ahora apuesta por la fotovoltaica y la eólica.
Abengoa tiene un problema serio: la planta
termosolar de Solana, en el estado de Arizona. La central, inaugurada en 2013 después de tres años de construcción y una inversión de unos 1.500 millones de euros, no está cumpliendo las expectativas iniciales. Y el nuevo consejero delegado de la compañía andaluza,
Santiago Seage (
en la imagen) sabe que no es cualquier planta: es la primera central de
Abengoa en Estados Unidos con un sistema propio de almacenamiento de energía térmica. Además, es la planta cilindroparabólica más grande del mundo, con una potencia instalada de 280 megavatios (MW).
El problema es que no está generando toda la energía prevista, tal y como publica este lunes
The Wall Street Journal, según datos del Departamento de Energía de Estados Unidos. Así, en lugar de un millón de MW/hora al año y abastecer a 70.000 hogares, la instalación no ha logrado superar los 500.000 MW/hora anuales.
Pero los problemas de las centrales termosolares -no sólo de
Abengoa, sino de todas las compañías energéticas- van más allá de lo puramente económico. Hablamos de cuestiones medioambientales, que no sólo encarecen los proyectos, sino que provocan el rechazo social de los proyectos. Es el caso de la planta Ivanpah Solar Electric Generatin System, situada en el desierto de Mojave, en California. La instalación, propiedad de NRG Energy, Google -sí, el buscador- y Brightsource Energy, y construida por Abengoa, sería la causante de la muerte de unas 3.500 aves cada año, debido a las altas temperaturas que se registran en la zona y que pueden llegar a los 537ºC.
En todo caso, a rey muerto, rey puesto. A las dudas de la tecnología termosolar se une el auge de la fotovoltaica, más madura, más barata y cada vez más eficiente, aunque sigue siendo muy minoritaria. Las plantas fotovoltaicas en EEUU generan seis veces más de energía que las termosolares, esto es, 16 millones de MW/hora anuales, con lo que cubren sólo el 1% de la demanda total del país. La comparativa de los precios también es elocuente: el kilovatio/hora generado por paneles solares ronda los cinco centavos de dólar. El kilovatio/hora generado en Ivanpah cuesta entre 12 y 25 centavos.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com