La dictadura venezolana ha liberado estos días a un total de 71 presos políticos que habían sido encarcelados tras la represión contra las protestas por el pucherazo electoral de Nicolás Maduro, en julio de 2024.

Entre esos 71 presos liberados hay 65 hombres, tres mujeres y tres adolescentes, lo que da idea de la crueldad de esta dictador comunista. 

El Comité de Madres en Defensa de la Verdad dio a conocer la noticia: "Es un logro importante, pero insuficiente, por ello exigimos la libertad plena de todos a través de una amnistía general (…) La injusticia sigue afectando a centenares de familias en todo el país".

El contexto de esta liberación de presos políticos es la presión a la que la administración Trump está sometiendo al régimen, al que acusa de traficar con drogas hacia EEUU y al que está tratando e asfixiar económicamente apresando "petroleros sancionados". 

Un "petrolero sancionado" es un buque que Washington ha incluido en una lista negra (principalmente la lista SDN del Departamento del Tesoro, Specially Designated Nationals and Blocked Persons List) por haber infringido sanciones o reglas: por ejemplo, evadiendo controles, o por estar ligado a empresas fantasma que se dedican al contrabando, etc.

Además, recientemente, la Casa Blanca sancionó a familiares de Cilia Flores, la mujer del dictador venezolano Nicolás Maduro, acusados de corrupción.

En este contexto, la opositora venezolana María Corina Machado, ganadora del Premio Nobel de la Paz 2025, ha dirigido un mensaje a sus compatriotas en el que anunció que va a volver a su país en breve para iniciar un proceso de cambio “indetenible, irreversible, ordenado, justo y transparente”.

“Pronto, muy pronto, estaré de regreso en Venezuela para concretar, junto a cada uno de ustedes, la fase definitiva de nuestra lucha, una lucha que ya es universal”, concluyó la valiente opositora.