• O por qué la economía moderna siempre marcha mal.
  • Lo comprenderán con el pincho de tortilla y el zumo de naranja.
  • En un bar de Madrid de toda la vida: 3,50 euros.
  • En la nueva y muy moderna cadena de proletarios de enfrente: 5,30 euros. Pero tortilla congelada.
  • Solución: ofrece lo que la gente necesita y haz dinero poco a poco.
  • Y más vale un pequeño propietario que un gran ejército de proletarios.
Bar Forum (a la izquierda de la imagen), una cafetería tradicional del centro de Madrid, en Chamberí. Un éxito a la hora de los desayunos. Por ejemplo, un zumo de naranja y una tortilla de patatas, recién hecha, oiga usted, allí de cara al público, costaba 3,5 euros. Desgraciadamente, quebró, no por que fuera muy barata sino por jubilación del propietario. Enfrente, una de estas modernísimas cadenas de cafetería también enfocada al desayuno (a la derecha de la imagen). Como el Forum también ha cerrado, aunque desconozco los motivos. Decoración minimalista. Si pedías el mismo servicio, zumo de naranja y tortilla española, te cobraban 5,30 euros. Con una diferencia, respecto al bar tradicional: la tortilla era congelada y te la calentaban en un microondas. No la hacían allí. El espíritu artesano no casa con las modernas cadenas. Esto es la modernidad. ¿Eficiencia? No, carestía. Mucha apariencia y poco sabor… o por qué la economía moderna siempre marcha mal. Solución: ofrece lo que la gente necesita y haz dinero poco a poco. Como se hacía antes. Porque si la modernidad es eficiencia, que se pare el mundo, que me apeo. Y oiga, más vale un pequeño propietario que un gran ejército de proletarios. Eulogio López eulogio@hispanidad.com