Warner Bros. Discovery (WDD) no renuncia al woke, como sí ha hecho Disney, por ejemplo, y otras muchas multinacionales de otros sectores. Y en el entretanto, en pleno auge de las plataformas y con una elevada competencia, cuando ya no afrontan limitaciones, WDD ha decidido limitarse y volver a la clásica división que había en EEUU entre ficción e información.

Recuerden que en la industria audiovisual estadounidense antes había dos normas: por un lado, la empresa que tenía un canal nacional no podía tener un canal local; y por otro, si se dedicaba a la producción no podía hacer emisión, es decir, o hacía ficción o hacía información. Sin embargo, estas normas han ido quedando en el olvido... dando pie a grandes conglomerados audiovisuales y también se ha entrado en el negocio de las plataformas de streaming. Como bien saben, los contenidos en streaming han provocado la disminución de los canales de la televisión tradicional e incluso de los canales de tv por cable (que tenían un gran auge en EEUU). Y en este escenario, entra otro factor en juego: lo difícil que es lograr rentabilidad en streaming, pues los costes de crear y producir contenidos no son baratos, y ante la elevada competencia en el negocio se juega a intentar tener precios bajos (aunque estos ya han ido subiendo en los últimos años) y también a incluir publicidad.

 

Todo esto lo está notando Warner Bros. Discovery, que surgió de la fusión de dos grupos de entretenimiento audiovisual (WarnerMedia y Discovery) en abril de 2022. Hoy el conglomerado resultante está controlado en un 71% por AT&T y en un 29% restante por los accionistas de la antigua Discovery, y lo dirige David Zaslav. Ahora ha vuelto a la clásica división estadounidense entre ficción e información, pues se segregará en dos cotizadas a mediados de 2026: por un lado, el negocio de streaming y de producción cinematográfica; y por otro, el negocio de los canales de tv por cable (el cual incluye la cadena de noticias CNN y otros). De esta forma, se confirma que aplicará el ‘esquema Villalonga’ (el mismo que en su día aplicó Juan Villalonga cuando presidía Telefónica, bajo el principio infundado y anglosajón de que la suma de las partes vale más que el todo), como ya anunció hace unos meses, con el objetivo de maximizar ambos negocios...

“Al operar como dos compañías distintas y optimizadas en el futuro, estamos dotando a estas icónicas marcas del enfoque más preciso y la flexibilidad estratégica que necesitan para competir con mayor eficacia en el cambiante panorama mediático actual”, ha señalado Zaslav. “Esta separación fortalecerá a cada compañía, permitiéndoles aprovechar sus fortalezas y perfiles financieros específicos. Esto también les permitirá buscar importantes oportunidades de inversión e impulsar el valor para los accionistas”, ha añadido.

El negocio de streaming y de producción cinematográfica se denominará Streaming & Studios; estará dirigido por el actual presidente y CEO de Warner Bros. Discovery, David Zaslav, y se compondrá de: Warner Bros. Television, Warner Bros. Motion Picture Group, DC Studios, HBO y HBO Max (plataforma de streaming que pasó a llamarse solo Max pero ha vuelto a su antiguo nombre).Y por otro lado, el negocio de los canales de entretenimiento, deportes y noticias se denominará Global Networks y lo dirigirá Gunnar Wiedenfels, actual director financiero del conglomerado; agrupando los canales CNN, TNT Sports, Discovery, Discovery+ y Bleacher Report. Además, Global Networks mantendrá una participación de hasta el 20% de Streaming & Studios. 

Habrá que esperar para ver si la segregación es fructífera o no, pero por ahora, la reacción de los inversores ha sido bastante ambigua: la cotización ha llegado a subir un 10% durante la sesión bursátil estadounidense del 9 de junio, pero cae un 3% en las operaciones postmercado. Y en cuestión de contenidos, no sólo sigue sin renunciar al woke sino que también padece falta de ideas (algo que también se ve en Disney y en Paramount -la cual fue comprada por Skydance-): algo que se puede ver en la nueva serie que prepara sobre el famoso mago Harry Potter... donde habrá personajes ‘inclusivos y diversos’ de entre 9 y 11 años “sin tener en cuenta el origen étnico, sexo, discapacidad, raza, orientación sexual, identidad de género”... que residan en Reino Unido e Irlanda. Esta serie se estrenará en 2026 a través de HBO y recientemente ha sumado siete nuevas incorporaciones a su elenco. Eso sí, la escritora J.K. Rowling (creadora de la exitosa saga literaria de Harry Potter que ha inspirado películas, obras teatrales y ahora también una serie) participa como productora ejecutiva junto a Neil Blair, Ruth Kenley-Letts y David Heyman, pero no hay que olvidar que Rowling ha sido muy crítica con la ideología trans, por lo que la apuesta por la inclusión y la diversidad de la serie seguramente no llegue a dicho tema.