La economía española no crecerá este año el 4,5% sino el 4,1%, según las proyecciones macroeconómicas publicadas este viernes por el Banco de España, que rebajan las realizadas por el organismo en abril. La inflación, por su parte, cerrará el año en el 7,2% -actualmente está en el 8,7%-, pero lo más preocupante es la subyacente -sin energía ni alimentos frescos- que terminará diciembre en el 3,2% -actualmente supera el 4%-.

Las previsiones son malas y ponen de manifiesto el fracaso de las medidas del Gobierno, por mucho que Nadia Calviño presuma de lo contrario.

Lo único positivo es el déficit que, según el BdE cerrará el ejercicio en el 4,6% y no en el 5%, estimado en abril. La deuda pública, por su parte, alcanzará el 114,1%, frente al 112,6% anterior. Recuerden, además, que el BCE dejará de comprar deuda soberana a partir de julio, lo que supondrá un golpe importante para las cuentas públicas españolas, que tendrán que financiar la deuda a mayor interés.

Después de esto, a ver qué dice Nadia. Se lo adelanto: dirá que el Banco de España respalda las previsiones del Gobierno y que todo va bien gracias a Sánchez, naturalmente.

Luego está la manipulación de TVE. El canal 24Horas aseguró que el BdE solicita que las ayudas se limiten lo máximo posible -no está el horno para bollos-, pero acto seguido, el desarrollo de la noticia comenzó afirmando que precisamente, eso es lo que pide el BdE: más ayudas para paliar los efectos de la crisis. O sea, como el Gobierno.