La SEPI ha autorizado su quinto rescate (112,8 millones de euros, que irán a Tubos Reunidos). Sin embargo, conviene destacar que va muy lenta, sobre todo, tras la polémica que generó el concedido a Plus Ultra. Y ojo, porque el Gobierno no puede presumir de ayudar a las empresas estratégicas: los rescates concedidos hasta ahora sólo suponen 1.080,8 millones de euros, es decir, el 10,8% de los 10.000 millones que conformaron el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas.

El primer rescate concedido fue el de Air Europa (475 millones); el segundo, el de Ávoris (320 millones); el tercero, el de Duro Felguera (120 millones) y el cuarto, el de Plus Ultra (53 millones). Ahora se suma el de Tubos Reunidos, que la empresa vasca de tubos de acero sin soldadura había solicitado el pasado enero (momento en el que cayó en bolsa) y que esperaba que llegaría este mes, como informó en la Junta de Accionistas celebrada el pasado 30 de junio. Un rescate que ahora sólo queda pendiente del visto bueno del Consejo de Ministros. Desde la dirección de la compañía, que encabeza Francisco Irazusta como presidente y Carlos López de las Heras como CEO, se defiende el carácter estratégico porque acapara el 7,3% del empleo total del sector (1.380 personas de forma directa y otras 7.000 de forma indirecta), tiene 400 clientes y exporta el 90% de la producción.

El rescate es otro hito desde que en octubre de 2019 Tubos Reunidos logró refinanciar la totalidad de su deuda financiera de 351 millones, después de la presión pública, la cual logró doblegar a la banca acreedora. Unas presiones que adelantó Hispanidad. Sin embargo, en bolsa no ha caído bien la noticia del rescate: la cotización ha caído un 3,12%.