Se veía venir después de un último ejercicio fiscal desastroso, con números rojos de 11.000 millones de dólares y una deuda de 128.000 millones. Softbank no ha mejorado durante su primer trimestre fiscal (abril-junio), en el que registró pérdidas de 3,16 billones de yenes, algo más de 22.900 millones de euros a pesar de aumentar la facturación un 6,3%, hasta los 1,57 billones de yenes (en euros, 11.390 millones).

La clave del trimestre fue la caída en bolsa de algunas empresas tecnológicas en las que participa, como la surcoreana Coupang (comercio electrónico) o la compañía SenseTime, de inteligencia artificial. Eso sin contar con Uber, que ya lastró los resultados de 2021 junto con WeWork.

“Los mercados están en una gran agitación y en ese contexto estamos presentando pérdidas importantes”, afirmó este lunes el Ceo del grupo, Masayoshi Son durante la presentación de resultados.

Fue en esa rueda de prensa donde el directivo dio la noticia más inquietante y anunció un ejercicio “dramático” de reducción de costes en toda la compañía, especialmente en el fondo Vision Fund. “Tenemos que recortar los costes sin áreas sagradas”, señaló Son.