No me extraña. Yo también estoy inquieta. La prima de riesgo ha escalado desde los 60 puntos del lunes 16 de junio, hasta los 70 en los que se sitúa en el momento de cerrar esta información.
Llegó a tocar los 72 puntos el jueves 19, punto álgido del culebrón Santos-Ábalos-Koldo y el estallido del último escándalo de corrupción que, aunque Pedro Sánchez no lo admita, acecha a Moncloa.
Todo esto unido al editorial de The Times que ha exigido a Pedro Sánchez que gobierne “o diga adiós”.
La prima de riesgo mide la diferencia entre lo que se paga por el bono español a 10 años respecto al bono alemán, de referencia en el continente por ser el más seguro de la UE.
Echamos un vistazo a la ‘prima alemana’ que se sitúa en negativo, concretamente, en los -188 puntos básicos.
Volviendo a España, si nos fijamos en el nivel que tenía el 11 de junio, justo un día antes de que se conocieran las primeras revelaciones del informe de la UCO, se situaba en los 59 puntos.
La de Portugal, por ejemplo, no ha variado y ese mismo 11 de junio estaba en los 52 puntos, mismo nivel en que se situaba el viernes 20.
La de Francia partía de 70 y escaló hasta los 73; la de Italia pasó de los 96 a los 100 puntos.
Nintendo resucita
Y lo hace de la mano de Switch 2 que ha vendido 3,5 millones de unidades en sus primeros cuatro días, tras salir al mercado.
Dicen los expertos que estamos ante el lanzamiento, ocho años después, más éxito de su historia que solo puede dar un empujón a la compañía, algo deprimida en los últimos tiempos.

Recordar que,su predecesora, la Nintendo Switch, vendió 2,76 millones de consolas, en los primeros 30 días en el mercado.
Nintendo se disparaba en Bolsa el miércoles 18, casi un 7% al calor de los buenos datos de ventas. En lo que va de año sube un 40%.
Un apunte curioso. Para fabricar la Switch 2, Nintendo se ha aliado con Nvidia.
El petróleo sigue barato… pero hay quién lo ve en los 170 dólares por barril
Lo dice Singular Bank tras advertir sobre los riesgos económicos globales derivados del conflicto entre Israel e Irán. Explica su economista jefe, Alicia Coronil Jónsson, que una escalada regional que implique a más países en Oriente Próximo, podría hacer que el precio del barril de Brent alcance los 170 dólares, “con un fuerte impacto en el crecimiento global y la inflación”.

Más conservadoras son las previsiones de Citigroup. Estima que el cierre del Estrecho de Ormuz podría llevar el precio del petróleo Brent hasta los 90 dólares por barril. “Aunque un cierre prolongado es considerado poco probable”, aseguran sus analistas, “cualquier interrupción podría causar un aumento significativo en los precios del petróleo hasta esos niveles si se produjera el bloqueo de 3 millones de barriles diarios durante varios meses”.