A Mercedes-Benz le sienta bien dedicarse al lujo, concretamente al coche de alta gama (también denominado premium). Y es que los altos márgenes de este segmento le han permitido elevar el beneficio neto, el operativo (ebit) y los ingresos en 2022, aunque sólo ha vendido un 5% más de turismos. Además, no le ha afectado la salida de Rusia

El grupo automovilístico alemán, que fabrica y vende en España, ha logrado un margen del 14,6%, según han destacado los analistas del Banco Sabadell, superior al de 2021 y que le ha permitido aumentar su beneficio neto un 34%, a 14.809 millones de euros, y su ebit un 28%, a 20.458 millones, crecimiento superior al previsto por el consenso de analistas y que se ha debido al foco en turismos de alta gama y furgonetas premium, y al estricto control de costes. Por su parte, la facturación ha ascendido a 150.017 millones (+12%), también por encima de lo esperado por los analistas,... y eso que sólo ha vendido un 5% más de turismos (segmento en el que ha ocupado la décima posición en España, con 36.479 unidades, un 8,3% más que en 2021). Sus ventas totales se han mantenido en el mismo nivel que el año anterior (2.043.900 entregas, un 1% menos) por las medidas Covid, los chips y los problemas logísticos, aunque ha disparado las de vehículos eléctricos (+124%, a 117.800). 

Prevé crecimiento de ventas en 2023, pero aún inferior a las preCovid, estabilización de la producción y un ebit ligeramente inferior porque aumentarán los vehículos de la parte baja del catálogo, aunque que los márgenes se mantendrán altos

Mercedes-Benz quiere premiar a los accionistas y propondrá elevar el dividendo a 5,20 euros por acción, algo que lógicamente ha gustado al mercado: su cotización ha subido más de un 2,5%. Eso sí, ha advertido de que ha registrado una demanda demasiado lenta en Europa por varios motivos (restricciones Covid en China, altos costes de energía y de materias primas, y presiones inflacionistas), lo que sitúa a EEUU con mejores perspectivas para crecer… y además con incentivos por la Ley para la Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés) que ha lanzado. Asimismo, está recurriendo a un modelo de venta directa en varios países europeos y Reino Unido, que extenderá a Alemania, según ha anunciado el CEO, Ola Källenius, porque “ahorra costes para la empresa” y no descartan subir precios ante el aumento de costes que seguirán afrontando, como tantos otros sectores.

De cara a 2023, esperan que continúe el dinamismo con un crecimiento de las ventas, pero aún inferior a las preCovid. Asimismo, prevén que se estabilizará la producción y que el ebit será ligeramente inferior al de 2022, porque aumentarán los vehículos de la parte baja del catálogo, aunque que los márgenes se mantendrán altos (entre el 12% y el 14%), según los analistas del Banco Sabadell.