Heineken (Amstel, Desperados o Birra Moretti) ganó 2.300 millones de euros el año pasado, un 15% menos, ha informado la cervecera holandesa, la segunda mayor productora de cerveza del mundo.

La facturación llegó a los 36.400 millones de euros, un 4,9% más, beneficiada por la subida de los precios, aunque también tuvo que compensar la inflación de las materias primas y la energía (...) "lo que repercutió en la demanda de los consumidores”.

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De hecho, este último concepto compensó la disminución del 4,7% en los volúmenes de ventas (242,6 millones en 2023). La multinacional cervecera notó mucho la caída de sus ventas en dos países con problemas, como Nigeria y Vietnam. 

Dolf van den Brink, director ejecutivo de Heineken, señaló que "tras un sólido 2022, 2023 resultó ser un desafío”. De cara a este año, el CEO no se mojó por culpa de "la economía global y las tensiones geopolíticas”. "Nuestro enfoque futuro será el crecimiento de los ingresos, equilibrado entre volumen y valor, continuando con las inversiones en nuestras marcas e innovaciones”.