Contratar es cada vez más caro y más difícil, y ahora no lo decimos nosotros, sino que lo demuesta la Encuesta Anual de Coste Laboral publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). ¿El motivo? La subida de los costes laborales, que registraron un incremento del 3,9%, en el 2024 hasta los 37.308,9.

Sí, es cierto que se incrementa el salario anual bruto por trabajador, lo hace un 3,8%, hasta los 27.558,68 euros. Lo que puede ser una gran noticia: los salarios deben aumentar, sobre todo los más bajos. Pero ojo, porque lo que dispara los costes laborales son los costes no salariales, que subieron un 4,4%, siendo las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social, la partida más importante, con 9.000,03 euros por trabajador, el 24,0% del coste laboral. Nuevamente, el Gobierno se ha subido más lo que cobra él mismo, que los salarios de los trabajadores. 

Las cuotas sociales, que son el mayor lastre de la creación de empleo no dejan de subir, todo ello teniendo en cuenta que seguimos siendo el país con más desempleo de la UE y la OCDE.

A lo que hay que sumar los siguientes objetivos de Yolanda: encarecer el despido, subir el SMI con su correspondiente aumento de las cotizaciones sociales y reducir la jornada laboral. Es decir, poner más trabas a la creación de empleo y hacer más caro, aún más, el coste laboral.