Ford ha pisado el freno por culpa del batacazo bursátil de Rivian Automotive y a esto se suma un conflicto de patentes de chips de radio móviles que ha llegado a los tribunales en Alemania. Todo ello se ha dejado notar en la cotización del fabricante automovilístico estadounidense con sede en Detroit, que baja casi un 3% y acumula una depreciación de casi el 43% este año.

Ford ha empezado a vender parte de sus acciones en Rivian, un fabricante estadounidense con sede en Plymouth que se dedica exclusivamente a coches eléctricos, del que tenía un 11,4%. En concreto, ha vendido 8 millones de acciones por unos 200 millones de euros, según Reuters. Asimismo, Rivian tiene como accionistas al fondo de inversión T Rowe Price (17,7%) y al gigante de comercio electrónico Amazon (17,7%).

Alemania es el séptimo mercado para el fabricante automovilístico estadounidense, tiene dos fábricas allí (la de Colonia-Niehl y la de Saarlouis -que compite con la española de Almusafes para adjudicarse los nuevos coches eléctricos en Europa), así como un centro de investigación e información en Aachen

El movimiento de Ford se produjo tras registrar unas pérdidas de 2.952 millones de euros en el primer trimestre, frente a los 3.097 millones que ganó hace un año; unas pérdidas operativas de 3.655 millones; y facturar 32.746 millones (-4,84%) Todo ello, después de haber arrancado en 2021 dejando los números rojos experimentados durante el Covid. En la vuelta a pérdidas ha influido bastante la pérdida de valor de Rivian, tras subir precios y empezar a registrar cancelaciones de pedidos, así como por el anuncio de que Amazon compraría furgonetas eléctricas a Stellantis, y al verse también afectado por la crisis de chips -que lleva sufriendo todo el sector desde 2019) y la falta de arneses de cables por la guerra en Ucrania

Por si esto fuera poco, ahora Ford suma que el Tribunal Regional de Múnich le ha impuesto una prohibición de venta y producción en Alemania, como informa ABC. Esto se debe a un conflicto de patentes de chips de radio móviles relacionados con la conectividad 4G y el sistema automático de llamada de emergencia (‘eCall’), que es obligatorio en los coches nuevos desde el 1 de abril de 2018. Por ahora, gana el explotador de patentes japonés IP Bridge, pero para que la sentencia se ejecute debe depositar una fianza de 227 millones y el veredicto se ejecutaría en una o dos semanas si Ford no llega a un acuerdo con el demandante o apela. Cualquiera de las dos opciones son posibles, teniendo en cuenta que Alemania es el séptimo mercado para el fabricante automovilístico estadounidense y cuenta con varias fábricas allí (la de Colonia-Niehl y la de Saarlouis -la cual compite con la española de Almusafes para adjudicarse los nuevos coches eléctricos en Europa), así como un centro de investigación e información en Aachen.