
Mientras el Gobierno en general y Pedro Sánchez en particular, presumen de lo que bien que marcha la economía española, las empresas de nuestro país declaran que facturaron menos en el segundo trimestre del año, según la Encuesta del Banco de España sobre la Actividad Empresarial -serie desestacionalizada- publicada este lunes.
En esta línea, casi el 30% de las compañías se vieron afectadas negativamente por los aranceles de EEUU, aunque el BdE aclara que el impacto fue indirecto y estuvo asociado al aumento de la incertidumbre y a la menor actividad económica global.
Lo peor vendrá después, si la situación actual perdura en el tiempo, ya que más del 45% de las empresas afectadas aseguran que trasladarán el incremento de los costes a sus precios de venta -y habría que añadir, más todavía-, mientras el 34% prevé diversificar su cadena de suministro buscando proveedores en otros países y un 28% tienen intención de abrir nuevos mercados en el extranjero.