La inversión publicitaria en televisión alcanzará los 1.700 millones de euros en 2022, un 4-5% menos que en 2021, algo similar a la del pandémico 2020, algo menor que la de 2013, el peor año de la crisis financiera, y semejante a la de los años 1997-1998 del pasado siglo, según el Análisis de la Industria Televisiva 2022 realizado por Barlovento Comunicación.

Son datos provisionales, pero no serán muy distintos a los definitivos, y se explican, en parte, por el descenso del 11% del consumo de televisión en España, que se situó en 190 minutos por persona/día. Desde que hay registros (1992) no habíamos visto tan poca televisión en nuestro país, un dato muy positivo, aunque engañoso, porque el consumo híbrido -TV más vídeos en internet- aumentó un 16,7%, esto es, 35 minutos cada día.

Lo que no varía es el Duopolio TV (Atresmedia-Telecinco), que cerrará el año con una cuota de pantalla del 54% aproximadamente, y concentrando el 84% del pastel publicitario. Solo estos dos grupos se llevarán unos 1.430 millones de euros del total de 1.700 millones (715 millones cada uno), a pesar de que sus dos canales principales tienen solo un 26% de cuota de pantalla (13,9% Antena 3 y 12,4% Telecinco).

Y todo esto mientras aumenta la oferta de la televisión de pago y las plataformas de streaming -los Netflix, HBO y compañía-, que comenzaron ajenas a la publicidad, han empezado a lanzar suscripciones más económicas, pero con anuncios. Habrá que esperar para calibrar el impacto de esta medida. De momento, el Duopolio TV sigue tan vivo como siempre… y eso no es una buena noticia, no por las plataformas, sino porque va en contra de la libertad informativa y de expresión.