Este lunes, sorprendentemente, han llegado más cortes de cabezas tras el error en los trenes de Asturias y Cantabria que ha desatado una crisis que ha salpicado a Renfe, Adif y al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Y ahora no han sido ceses de directivos secundarios y desconocidos, sino que han dimitido Isaías Táboas, presidente de Renfe, y la secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, que presidía Adif en 2019, cuando Renfe lanzó el concurso para adjudicar la renovación de los trenes de Cercanías de ancho métrico en dichas regiones.

Unas dimisiones que no se esperaban y mucho menos que se produjeran horas antes de la reunión entre la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, y los presidentes de Asturias y Cantabria, el socialista Adrián Barbón y el regionalista Miguel Ángel Revilla, respectivamente. Cuando se conoció el error, Revilla calificó el tema como “chapuza” y Barbón señaló que “tienen que rodar cabezas”. En concreto, fueron el responsable de Gestión de Material de Renfe y el jefe de Inspección y Tecnología de Vía de Adif los primeros que ‘pagaron el pato’, hasta ahora.

Ya se conocen sus sustitutos: Raül Blanco será el nuevo presidente de Renfe y David Lucas, el nuevo secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana

En la mañana de este mismo lunes, en un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, Barbón ha agradecido que la primera reacción de Raquel Sánchez fuera “dar la cara”. Sin embargo, el presidente de Asturias sostuvo la necesidad de que se depuren “responsabilidades” y también que no está dispuesto a “comprar cualquier plazo” para la puesta en servicio de los nuevos trenes ante el “ridículo en el que nos sentimos”. Y antes de su cita con la ministra, Barbón y Revilla han señalado que el Gobierno no les había informado de las citadas dimisiones. 

Parece que la chapuza de los trenes de Asturias y Cantabria no es un tema menor, pues hay 150 millones de euros del Banco Europeo de Inversiones (BEI) en juego... y sí, ya había un prototipo. Unos nuevos trenes que se le adjudicaron a Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), que en 2021 ya detectó el error en el gálibo que le había proporcionado Renfe y se lo trasladó a este, pero no pasó nada. Una chapuza que ha saltado a la palestra informativa, pero de la que hace menos de una semana hizo una vergonzante omisión el propio Táboas en un desayuno informativo organizado por la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE). 

Ya se ha conocido quiénes serán los sustitutos de los cesados. El barcelonés y miembro del PSC (en concreto, forma parte de su Comisión ejecutiva) Raül Blanco será el nuevo presidente de Renfe, volviendo al Gobierno, después de que a finales del pasado diciembre fuera destituido como secretario general de Industria y Pyme, en favor del senador asturiano Francisco Blanco. Por tanto, se mantiene la cuota del PSC, que tiene entre sus representantes a: Raquel Sánchez; Raül Blanco; Marc Murtra, presidente de Indra; Jordi Hereu, presidente de Hispasat; y Maurici Lucena, presidente y consejero delegado de AENA. Por su parte, el socialista madrileño David Lucas será el nuevo secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, ascendiendo desde el cargo de secretario general de Agenda Urbana y Vivienda que ocupaba actualmente.